Mou no habla pero figura
Viernes, 15 Abril 2011Es el apuntador de este teatrillo y no rinde cuentas a nadie. Parapetado en su espectacular currículum y en la pleitesía que le rinde su plantilla, Mourinho ha querido buscar las cosquillas a la prensa deportiva: le tocaba hablar hoy, pero ha preferido fiscalizar la rueda de prensa de Karanka. Y que conste que no me parece mal su silencio, pues sus innumerables comparecencias públicas quizás ya hayan empachado a una afición que prefiere análisis futbolísticos a otra ristra de pataleos pueriles. Obviamente y a tenor del plante de la prensa en Valdebebas, parece que el míster sigue siendo el epicentro de todo lo que respira el Madrid. Así que ha salido Karanka y se han quedado un puñado de periodistas, ¿no podía él responder sobre si mañana saldrán con todo el armamento para mantener viva la Liga? Porque intuyo que ésa habría sido la único pregunta con enjundia, el resto de temas calientes, sobre todo el de las tarjetas, ya los soltó Mou después del Tottenham-Real Madrid.
La crítica ácida es para el propio protagonista que, visto que no iba a pronunciarse, ha salido a figurar. A lo mejor estaba ahí para echar un capote a su segundo si el panorama verbal se ponía negro…vete a saber. El caso es que su presencia se asemejaba a la de un abogado que está pendiente de que su cliente no la cague delante del juez. Orfeo Suárez dice en su blog, Libre Directo, que su sonado gesto es una tesis más del maniqueísmo de Mourinho: “el mundo contra mí es el mundo contra nosotros”…Sus futbolistas agradecerán que no haya carnaza para las portadas de mañana, dada su permanente relación de sospecha con la prensa (twitter de Arbeloa: “Me alegro que el Madrid no ceda ante chantajes”). Y poco importaba lo que dijera Karanka; bueno, sí, su titular ha sido justificar al superior, “el mister no quiere calentar el clásico”. Habrá que esperar a la medianoche de mañana para averiguar si al portugués le da o no por explicar lo sucedido en el partido. Pero, ¡cuidado!, porque si el Madrid gana y él habla, le pueden chirriar los oídos con la palabra ventajismo. Aunque, pensándolo bien, le traerá sin cuidado: su hábitat no está en España y mucho menos con la opinión pública de aquí. Lo confesó el pasado miércoles en Londres. Al menos, la UEFA sí que le obligará salir a la palestra; de lo contrario, multazo como ya le ocurrió cuando entrenó al Chelsea.
Pero, ciertamente, el madridismo no está pendiente de dardos verbales sino de goles. Y con Mourinho el club ha encontrado un gestor excepcional al que la urgencia de títulos le vale como coartada para manejar el Madrid como si fuera su rancho. Además, el clima de euforia ha calado tanto entre la afición que un solo título le convertiría casi en mártir. En contraste, la lectura pesimista se simplificaría en la resignación de que se ha intentado pero el Barça es el mejor hoy por hoy. Nunca antes el Madrid se había jugado tanto crédito en apenas tres semanas. Y como dijo Valdano anoche en COPE, “el mundo les está mirando”: puede, pero no sé si desde este sábado. En Barcelona el mensaje es claro: “hay que ganar en el Bernabeu para ser campeones” (Guardiola en rueda de prensa); en Madrid, con todo el lío de Valdebebas, uno ya no sabe por dónde van los tiros. Como siempre desde esta temporada, Mou lo devora todo…con el beneplácito del presidente. En fin, mañana sí se hablará de fútbol.