Nuevo revés para la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE). Tras admitir a trámite un recurso presentado por Padawan, una pequeña empresa de informática, la Audiencia Provincial de Barcelona ha sembrado ahora las primeras dudas sobre el canon digital. Según la resolución a la que ha tenido acceso elEconomista, la Audiencia está estudiando "si la aplicación en España del canon por copia privada excede de lo que debería ser una compensación equitativa por la limitación que supone al derecho de reproducción, tal y como es concebido por la directiva comunitaria".
El juez quiere saber en definitiva si se está produciendo una injusticia al exigir el pago del canon a personas o empresas que no van a realizar copia alguna, sino que se limitan a almacenar en los soportes afectados -CD o DVD, entre otros- información propia. Lo peor para los autores, sin embargo, no es que los tribunales duden por primera vez de la validez del canon digital, sino el hecho de que los 250 juicios que tienen en marcha podrían paralizarse hasta que haya una resolución a nivel europeo.
Cuestión prejudicial
Y es que la Audiencia de Barcelona podría plantear una cuestión prejudicial ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas de Luxemburgo para valorar la equidad del canon, por lo que todos los procesos abiertos deberían esperar así a su resolución. De momento hay ya nueve juicios paralizados por la propia Audiencia, y aún en el caso de ganar la batalla, la SGAE podría tardar hasta cinco años en cobrar los más de 10 millones de euros que está exigiendo. Según Apemit, la asociación de pequeñas y medianas tiendas de informática que está solicitando la paralización de los procesos "la posibilidad de establecer una cuestión prejudicial en Luxemburgo ha supuesto la interrupción inmediata de todos los procedimientos contra el canon que se siguen en la Audiencia de Barcelona".
El abogado de Apemit, Josep Jover, insiste en que "la puerta ya está abierta para acabar con este modelo injusto de canon, pero es importante ahora empujar todos en el sentido correcto, para impedir que se ésta se cierre". El pasado 19 de septiembre, el comisario europeo de Mercado Interior, Charlie McCreevy abrió ya el debate en el seno de la Unión Europea sobre el cobro del canon digital al dudar también de un exceso recaudatorio. "De acuerdo con el análisis preliminar de la Comisión, sólo deben gravarse los soportes y equipos que puedan utilizarse, y que efectivamente se utilicen en medida apreciable, para hacer copias destinadas a uso privado", aseguró.