Gareth Bale fue la ausencia más destacada de la lista del Real Madrid para la Audi Cup que se celebra en Múnich y que les enfrenta ante el Tottenham. El galés, a pesar de quedarse en la capital española, no está lesionado y las dudas sobre su futuro son las que alimentan el misterio de su baja en el partido ante su exequipo.
Esta ausencia se produce tan solo un día después de frustrarse su salida al Jiangsu Suning chino, que no estaba dispuesto a pagar por un traspaso que exigió el Real Madrid. El club de la Superliga, que sí se disponía a ampliar el salariod el jugador, se decantó finalmente por Ivan Santini y agotó su cupo de jugadores extranjeros. La situación del galés tras el fracaso de la operación es ahora bastante dudosa.
La prensa inglesa habla de una baja por estrés, aunque en España los tiros van en otra dirección. A falta de dos días para el final de mercado en China y de 10 para el de la Premier, Bale sigue buscando un destino a contrarreloj. Así lo asegura El Transistor, de Onda Cero, que informa de una permanencia en Madrid que obedece a no entorpecer una posible venta con una lesión.
Algo parecido se vivió la semana pasada cuando el jugador ni se vistió ante el Bayern en EEUU. Zidane fue crítico con él, deseando una salida rápida del delantero. Posteriormente, sería el mismo Zidane el que informaría de que fue el mismo futbolista el que pidió no jugar.
En caso de esperar un traspaso, al de Cardiff se le acaban las opciones. Si un equipo chino no está dispuesto a pagar dinero, en Europa cada vez las alternativas son más escasas. Precisamente, ese Tottenham ante el que no jugará es una opción que sí podría satisfacer al Real Madrid...pero no a Bale.
Para regresar a la disciplina de los 'Spurs', el galés tendría que bajarse el sueldo de manera significtaiva. Otra vía sería del Manchester United, que sigue rechazando por el momento la venta de Paul Pogba, aunque existiría la posibilidad de incluirlo en un treque si se diese la circunstancia. La fecha límite es el 8 de agosto.