España ya tiene dos Mundiales. Quién lo iba a decir antes de 2006 cuando la selección conquistó Japón. Ahora ha sido en China, la confirmación de que el Lejano Oriente da suerte a los nuestros. Porque ya forman parte de nuestra historia con más de una década llena de éxitos, al más puro estilo de Rafa Nadal. No estaban ni Pau, ni Navarro, ni Felipe, ni Calderón ni Jiménez, pero este EQUIPO mantiene el ADN de los campeones. Y que siga siendo así.
Argentina se volvió a cruzar en el camino de España hacia el oro, como ya ocurrió hace trece años, aunque en aquella ocasión fue en semifinales. Se enfrentaron hoy dos equipos invictos en este Mundial de China, con siete victorias en su haber para cada uno. Las dos mejores selecciones que rompieron todos los pronósticos iniciales, pero desde el inicio hasta el final, los de Scariolo fueron infinitamente superiores. Como ante Italia y Serbia, la defensa fue la clave: todos a una, con ayudas, anticipándose a sus rivales al rebote y dejándose la vida en cada ataque argentino.
El entrenador italiano apostó desde el inicio del encuentro con Oriola en lugar de Claver, con el objetivo de evitar los puntos de Scola, el alma de esta Argentina junto con Campazzo. Y así fue. El pivot argentino estuvo desconectado y Oriola fue sumando los primeros puntos de España, además de anotar la primera canasta de la final desde el perímetro. Parcial de 7-0 y con 12-2 Sergio Hernández tuvo que pedir el primer tiempo muerto. El 'Facu' tampoco estuvo cómodo ni acertado desde el exterior.
Fue Brussino, que con dos triples motivó la primera y prácticamente única reacción de Argentina para meterse en el partido. Campazzo anotó su primera canasta y Deck consiguió un 2+1 para acercar a los suyos a uno (14-13). Había partido, había final, pero les duró a los argentinos muy pocos minutos porque España volvió a abrir brecha con un 7-0 de parcial para luego terminar el primer cuarto con nueve arriba (23-14). Era el comienzo del éxito, y a partir de ahí los de Scariolo no volvieron a verse amenazados en el marcador.

En el inicio del segundo cuarto, los de Scariolo siguieron a lo suyo y fueron aumentando su ventaja gracias a dos triples seguidos de Rudy, la aportación de los secundarios y a su extraordinaria defensa. Scola seguía desconectado con cero puntos y Argentina empezaba a depender de Deck o Laprovittola. Al descanso España llegó con 12 puntos de ventaja y grandes estadísticas: 20 puntos en la pintura, 10 rebotes de ataque (8 más que Argentina), 7/7 en tiros libres, tres pérdidas menos que su rival y con varios jugadores con protagonismo en ataque.
Tras el descanso, España no bajó de marcha y llegó a colocarse 20 arriba (65-45). Argentina jugaba ya a la desesperada, mientras que los de Scariolo sabían en todo momento lo que tenían que hacer. Ricky, Juancho, Willy encontraron los huecos para anotar y los de Hernández dependían cada vez más de Deck. A falta de los últimos diez minutos para conocer el campeón, España ya mandaba por 19 de ventaja (66-47). El Mundial, sin duda, estaba más cerca que nunca.
Pero Argentina es mucha Argentina y empezó a recortar distancia en el marcador. Los argentinos se dejaron la vida en la lucha por el rebote y de la mano de Deck y Laprovittola se llegaron a colocar a doce puntos (68-56) a falta de 7:27 para el final. El reloj corría muy lento para los de Scariolo, pero la calidad de Llull, con un 2-1 vital, y el acierto de Juancho, Ricky y Marc pusieron la puntilla definitiva (90-72) a menos de dos minutos.
Fue entonces cuando Hernández dio el partido por perdido retirando a Campazzo y Scola a 1:45 mientras de fondo se escuchaba a los aficionados argentinos, incansables desde el primero hasta el último minuto. Scariolo no quiso ser menos y también dio entrada a Rabaseda, Colom y Beirán, tres de los héroes de las ventanas FIBA de las que hoy ya nadie se acuerda. Final del partido (95-75) y España vuelve a hacer historia trece años después. Son auténticos héroes.
FICHA TÉCNICA
ARGENTINA: Campazzo (11), Brussino (8), Garino (-), Scola (8) y Delía (2) --quinteto inicial--; Deck (24), Laprovittola (17), Vildoza (2), Fjellerlup (-), Redivo (3), Gallizzi (-) y Caffaro (-).
ESPAÑA: Ricky Rubio (20), Rudy Fernández (11), J.Hernangómez (11), Oriola (6) y Gasol (14) --quinteto inicial--; Llull (15), W.Hernangómez (11), Claver (2), Ribas (5), Colom (-), Rabaseda (-) y Beirán (-).
--PARCIALES: 14-23, 17-20, 16-23 y 28-29.
--ÁRBITROS: Maranho (BRA), Rosso (FRA) y Anderson (USA). Eliminados Juancho Hernangómez, Ribas y Brussino por faltas personales.
--PABELLÓN: Wukesong Sport Arena de Pekín.