La gala del Balón de Oro 2018 coronó a Luka Modric como el mejor jugador del año, siendo además la primera vez desde 2007 que este galardón se entregaba a alguien que no era Cristiano Ronaldo o Leo Messi. Dos 'colosos' del fútbol que han monopolizado los premios durante diez años, pero que dejaron en su ausencia una de las imágenes destacadas de la fiesta del croata. Además, con el trofeo de France Football, portugués y argentino cierran un año donde no han asistido a ninguna gala del deporte rey.
"Estoy aquí por respeto a mis compañeros. Espero poder sustituir a Luka pronto, y para eso cuento con mis compañeros en mi equipo y en Francia", son las palabras de Antoine Griezmann una vez se supo que era el tercero clasificado en el Balón de Oro. Un mensaje que en cierta manera iba directo hacia Cristiano Ronaldo (segundo) y Leo Messi (quinto), pues Kylian Mbappé (cuarto) sí asistió para recoger también el trofeo a mejor sub-21.
Pero la no asistencia al Balón de Oro se junta con los desplantes de la gala de la UEFA celebrada en agosto (ambos estaban nominados al premio a mejor delantero, que ganó el portugués, y Cristiano también optaba a mejor jugador, que se llevó Modric) y a la gala The Best. En los premios de la FIFA ambos estuvieron reconocidos dentro del mejor equipo del año, pero fueron los dos únicos ausentes y la organización decidió rellenar sus huecos con Ronaldinho y Ballack, en un claro mensaje hacia su feo gesto.
En el caso de Cristiano Ronaldo no es nuevo, aunque sí muy destacado y llama más la atención por su salida del Real Madrid. El portugués ya dejó de ir a la gala de 2011 (que ganó Messi) argumentando que tenía que centrarse en un duelo contra el Málaga. En esta ocasión y con el dominio en los tres galardones de Modric, el portugués también ha declinado ir, aunque resulta más llamativo porque el premiado hasta hace unos meses era su compañero de vestuario. Además, siempre después de una gala alguna persona de su entorno ha lanzado mensajes en público criticando su no elección.
Por otra parte está el caso de Leo Messi, quien tampoco estuvo en 2017 (quinto Balón de Oro de Cristiano). El argentino ha quedado quinto y eso podría servirle de excusa a él y a la delegación del Barcelona, que no envió a nadie a París. Aunque no ha ido a las otras dos mundiales, sí que estuvo en la de LaLiga y los premios Marca, donde fue reconocido como MVP y pichichi de la temporada 17/18.
Unas ausencias que llaman la atención por lo que han representado ambas figuras en la última década y donde además, han recibido siempre el elogio de todos sus compañeros de profesión que han visto en primera persona como uno de los dos les dejaba sin premio. El año 2018 pasará a la historia como el fin de su reinado gracias al nivel de Luka Modric, sin embargo, portugués y argentino han declinado asistir a su coronación.