El Real Madrid coge ritmo tras su victoria ante el Girona en la ida de cuartos de la Copa del Rey y comienza a alejarse de la crisis que amenazaba con dinamitar la temporada. Pero paralelo al crecimiento del equipo, un jugador comienza a coger cada vez más peso sobre el césped. Es el caso de Vinicius, un delantero que ha llegado para quedarse en el Bernabéu.
"Está presentando un gran crecimiento, muestra cosas con continuidad, pero todavía tiene mucho por crecer y aprender", dijo Solari en rueda de prensa sobre el progreso del brasileño. El '28' encandila con cada partido a más y más aficionados y va confirmando las esperanzas que el madridismo puso en su figura ante la falta de fichajes.
Ante el Girona, Vinicius volvió a cuajar un partido excelso donde solo el gol le evitó de la matrícula de honor. Artífice del penalti que dio ventaja al equipo blanco y del pase a Marcelo que propició el desempate con el 3-2, el brasileño supo asociarse a la perfección con Benzema minutos después para regalar al francés el cuarto del encuentro.
"Se entiende muy bien con Benzema, tiene química y no solo en los partidos, sino también en los entrenamientos. Es muy bonito para nosotros", reflexionó el técnico rosarino sobre la conexión entre ambos delanteros. Y es que el galo, como el resto de los pesos pesados, está siendo clave en la madurez de 'Vini', algo que destaca su preparador, quien ya le tuvo en el Castilla y restó méritos a que no contase con más minutos cuando estaba Lopetegui.
Con Solari en el banquillo y aprovechándose de la plaga de bajas, el brasileño se está convirtiendo en un titular indiscutible y una de las grandes armas merengues arriba. Ahora llegan Asensio y Bale, pero Vinicius ya ha encandilado a la afición y a su técnico y promete seguir creciendo para confirmarse como la nueva esperanza del Madrid.
