Durante todo el mes de enero, Real Madrid y Barcelona buscaron reforzar sus plantillas para apuntalarse de cara al segundo tramo de la temporada. La necesidad de fichajes de futuro, las plagas de lesionados o el hecho de cubrir posiciones con pocos efectivos hicieron que los dos grandes del fútbol español atasen a Brahim Díaz, Jeison Murillo, Kevin-Prince Boateng y Jean-Clair Todibo. Pero pese a sus refuerzos, ninguno de los cuatro cuenta a día de hoy en los planes a corto plazo de sus respectivos entrenadores.
El mediapunta malagueño llegó al conjunto blanco tras sus nulas oportunidades en el Manchester City y como apuesta de largo recorrido en el Madrid. Brahim terminaba contrato con los ingleses en verano, pero antes de poder salir gratis decidió forzar su situación para marcharse de las islas británicas rumbo a España. De esta forma, el Madrid pagó 17 millones de euros (según Transfermarkt) para hacerse con un jugador llamado a copar protagonismo en el futuro, aunque la situación del futbolista no ha cambiado pese a vestir otros colores.
En La Castellana Brahim no ha sido todavía titular. En sus tres primeros encuentros sí contó con minutos de rodaje, eso sí casi 'de la basura'. El malagueño saltó 13 minutos al césped del Bernabéu con 3-0 en la ida de octavos de Copa del Rey ante el Leganés, una participación que se redujo a 9 minutos frente al Real Betis en LaLiga para cerrar la victoria por 0-1 y curiosamente, en la vuelta contra los 'pepineros' en Butarque donde solo tuvo 5 minutos fue cuando estuvo más cerca de marcar. Perdiendo 1-0, pero con la eliminatoria resuelta, el mediapunta lanzó un balón al palo que pudo haber significado su debut como goleador. Desde entonces, dos partidos en el banquillo y cinco sin convocar han sido el balance de un Brahim que ha regresado a su situación en el Manchester City.
Parecida suerte a la que está corriendo Murillo en el Barcelona tras salir del Valencia por la falta de oportunidades. Las bajas de Umtiti y Vermaelen obligaron a la directiva culé a buscar soluciones en el mercado y en la cesión del colombiano por 1,2 millones encontraron una situación rápida y cómoda. Murillo abandonó al cuadro ché, donde no tenía la confianza de Marcelino, antes de la apertura del mercado y tras varios entrenamientos debutó en la ida de octavos de Copa contra el Levante.
El central disputó los 90 minutos de la derrota por 2-1 y tras regresar al banquillo contra el Eibar en LaLiga, volvió a jugar ante los granotas en la vuelta, esta vez con victoria por 3-0. En esos 180 minutos de la eliminatoria se detuvo su participación, pues desde entonces ha compaginado cuatro suplencias con tres desconvocatorias hasta desaparecer por completo de los esquemas de Valverde. A final de temporada los culés tienen una cláusula para hacerse con él por 25 millones, pero esta situación hace que quede muy lejos y sea casi impensable.
Un ostracismo al que también ha sido empujado Boateng, pese a que empezó con fuerza en Can Barça. El delantero ghanés regresó a España tras su paso por el Sassuolo, para cubrir la venta de Munir, y nada más aterrizar salió de titular contra el Sevilla en la ida de cuartos de Copa. Un encuentro con escasa participación y 62 minutos mediante, Kevin-Prince se retiró del campo con 1-0 en contra.
Hasta ahí llegó su presencia como culé, pues en los cinco partidos que ha habido desde entonces, Boateng los ha pasado todos en el banquillo. Aunque ha habido lesiones como la Dembélé, Arthur o Messi y Coutinho ha estado en mal estado, el 'Txingurri' no ha recurrido al ghanés quien llegó cedido por 1 millón de euros y a final de temporada regresará a Italia a no ser que Bartomeu ejecute la cláusula de 8 millones. Otro fichaje, como el de Murillo, impensable con la situación actual.
Por último esta el caso de Todibo, jugador que los azulgrana ya tenían fichado pero que decidieron forzar su situación y hacerle llegar este mercado de invierno. El francés ha pasado a ser el sexto central del vestuario y aunque Umtiti sigue lesionado, Vermaelen ha estado tocado y la situación con Murillo ha sido la anteriormente mencionada, en los tres encuentros que ha podido disputar no ha sido convocado en ninguno. Su fichaje por otro millón de euros apunta más al futuro que a contar con oportunidades esta campaña.
Así está la situación de los cuatro fichajes que hubo en el mercado invernal en Real Madrid y Barcelona. Jugadores que llegaron para apuntalar las plantillas, pero que no han contado con apenas minutos y no parece que su rol vaya a cambiar antes de junio. 269 minutos entre todos para pasar del ostracismo de los dos grandes españoles.