El Manchester United estará en el bombo de cuartos de final tras vencer 1-3 al PSG y lograr una remontada que pasa a la historia del fútbol. La Champions League tiene estas cosas y un equipo con diez bajas, con un 0-2 en contra y con apenas tres ocasiones claras, supo interpretar a la perfección su plan para remontar y crear una pesadilla a su rival. El doblete de Lukaku y el gol de Rashford, en el tiempo de descuento, pusieron el 1-3 final que encumbra a Ole Gunnar Solskjaer, otra vez, al olimpo de los 'diablos rojos'.
Hubo milagro, qué milagro, y otra vez con Solskjaer como protagonista. Como en la Copa de Europa de 1999, cuando el por entonces delantero noruego redondeó una remontada en el descuento para coronar a los de Old Trafford en el Camp Nou. Esta vez, con él en el banquillo, tras llegar en Navidad, pese a perder por 0-2 en la ida, pese a tener nueve jugadores en la enfermería, pese a no contar con su estrella por una roja y pese a tener un nuevo contratiempo en forma de lesión durante el encuentro, Ole Gunnar supo interpretar como nadie el partido. Tres fogonazos, el último en el minuto 93 y de penalti rearbitrado por el VAR, para escribir otra página en la historia del Manchester United.
Todo empezó a la perfección. Los grandes tienen algo en la mejor competición de clubes del mundo. En el minuto dos, un Kehrer que lamentará toda su vida este partido, erró un pase atrás dejando solo a Lukaku. Thiago Silva y Buffon se tiraron con todo para detener al delantero belga, pero ésta iba a ser una noche en rojo, indumentaria blanca en el Parque de los Príncipes, y el '9' de los ingleses envió el esférico, a portería vacía, al fondo de la red.
La mejor forma posible de empezar una remontada en la que nadie creía. Mucho menos cuando una vez que el PSG asumió que iba por detrás, comenzó a tocar y tocar hasta encerrar a su rival. Fruto de ello, en el minuto 11, Mbappé se asoció a la perfección, dentro del área, con Bernat para que el español pusiese el empate y la calma en las gradas de la capital. Todo estaba controlado, ésta vez no iba a volver a haber pesadilla, como tantas otras veces...
Así lo indicaba el desarrollo del partido, con los locales dominando a su antojo a su rival, incapaz de salir del área. Bernat tuvo otra para hacer el segundo, pero De Gea estuvo atento antes de la media hora para salvar a los suyos. Eso de los porteros, tan solitarios y casi nunca héroes pero sí villanos. El español lo sabía, pero esta noche iba a ver cómo uno de los más grandes sucumbía el peor de los pensamientos de los guardametas.
Buffon, histórico de Europa, reconocido por todos, no estuvo nada acertado en el disparo de Rashford. El inglés golpeó con rabia desde fuera del área, todo iba hacia las manos del italiano, pero el esférico se escurrió y ahí, en el rebote, apareció atento Lukaku. Otra vez, el belga se aprovechaba de un error para marcar a placer. El 1-2, Solskjaer sonreía. Dos disparos, dos goles.
Entraron ahora sí las dudas a los galos, incapaces de creer cómo se había desarrollado todo. Cómo con tanto dominio iban por detrás y a un tanto de la pesadilla. En éstas, antes del descanso un Di Maria pasado de nervios, cerca estuvo de irse expulsado, y en los visitantes, Bailly cayó lesionado. El décimo diablo para la enfermería, ver para creer.
Aguantar para creer al final
Tras el descanso, necesario para el PSG, todo volvió a la normalidad. Los franceses dominando, los ingleses encerrados atrás, como si no fueran ellos los que necesitaban el gol para pasar. Daba igual, era el plan de Solskjaer y sus once eran soldados obedientes. Pasó el tiempo, entre intento del United de salir a la contra, entre llegada errada de los franceses.
Mbappé, un poco menos iluminado de lo habitual y bien agarrado por los centrales visitantes, no atinaba a asociarse con sus compañeros, pero un maravilloso taconazo suyo acababa en definición perfecta de Di Maria. Sin embargo, el argentino estaba claramente adelantado, gol anulado y todo seguía igual, el PSG virtualmente clasificado, pero a un gol del desastre.
Entraron Paredes y Meunier por Draxler, lesionado, y Kehrer, causante del fallo que abrió la lata. Mientras, el técnico noruego daba entrada a dos jóvenes Chong y Greenwood. Si había que morir que fuese con lo poco que había podido viajar a París, pero con sus ideas. Bernat pudo tener la sentencia en otra contra de Mbappé, de esas que no suele fallar la joya europea, sin embargo se resbaló y el rechace acabó en el español. Al palo. La eliminatoria seguía abierta a falta de siete minutos reglamentarios.
Se lanzó aquí con todo el United. Poco más tenían que ofrecer los ingleses, pues pese a todas las adversidades habían llegado vivos al final. Un disparo de Dalot desde lejos tocaba en Kimpembe e iba a ser córner para subir con toda la artillería, ¿o no? El VAR avisó a Skomina, posible mano del central francés, había que ir a la televisión.
Dudas, nervios y finalmente...¡penalti! El colegiado esloveno señaló la pena máxima, no iba a ser saque de esquina la última del United, iba a ser desde los once metros. Rashford, 21 años, asumía la responsabilidad. En uno de los Manchester menos reconocidos de la historia, la gesta le llamaba a él. Pasos adelante, mirada fría y disparo. Gol del delantero inglés, locura en el bando visitante y fantasmas en el local.
Remontada. Otra vez, como tantas otras. Con todo a favor, en casa, contra un equipo mermado y con dos goles de ventaja. Entró Cavani, lesionado desde febrero, para intentar que la gesta fuese gala, pero no hubo tiempo para ocasiones ni para más. El Manchester United aguantó todo lo que se le echó hasta el casi minuto 100 de partido, Skomina pitó el final y se desató la fiesta inglesa. Cuando nadie creía, cuando todo iba a ser una fiesta en el Parque de los Príncipes, Ole Gunnar Solskjaer, que sí sabe de heroicas en Champions, confió. El noruego tenía un plan y le salió a la perfección. Los diablos rojos conquistaron París y lo disfrazaron del Teatro de los Sueños, estarán en cuartos de final.
FICHA TÉCNICA
-RESULTADO: PSG 1-3 Manchester United (Bernat 11') y (Lukaku 2' y 30' y Rashford 93').
-PSG: Buffon, Kehrer (Meunier 69'), Thiago Silva, Kimpembe, Bernat, Verratti, Marquinhos, Dani Alves (Cavani 95'), Draxler (Paredes 69'), Di María y Mbappé.
-MANCHESTER UNITED: De Gea, Young (Greenwood 97'), Bailly (Dalot 34'), Smalling, Lindelof, Shaw, McTominay, Fred, Pereira (Chong 80'), Rashford y Lukaku.
-ÁRBITRO: Damir Skomina. Amonestó a Di Maria y a Paredes en el PSG y Shaw en el Manchester United.
-ESTADIO: Parque de los Príncipes.