El fútbol da muchas vueltas y lo que a veces hace estar a los jugadores en la élite de los clubes más potentes del mundo, en un par de meses puede llevarles al ostracismo. Eso es lo que está cerca de pasar con James Rodríguez, que tal y como desvela el diario Marca, no parece contar ni con el apoyo del Bayern de Múnich, su actual equipo, ni con el del Real Madrid, el conjunto que tiene su propiedad. De esta forma, el colombiano volverá a La Castellana este verano pero solo como paso previo a una nueva salida.
Niko Kovac y Zinedine Zidane ya tienen planes sobre James y ninguno de ellos pinta bien para el centrocampista. En los últimos meses de su cesión de dos años en los bávaros, quienes tienen una opción de compra de 40 millones de euros antes del próximo 15 de junio, pero con la vista puesta en los blancos ya que los alemanes no se harán con su ficha, el jugador colombiano mira hacia un futuro muy impreciso.
Los continuos roces con el técnico croata desde que asumiese el mando del Bayern y el pasado con el entrenador francés cuando ambos coincidieron en Madrid en 2017, han llevado a James a una situación de inestabilidad en la que sendos clubes no cuentan con él. Así, pese a su buen rendimiento y caché internacional, el 'cafetero' tendrá otra vez un verano movido en busca de un destino que le haga relanzar su carrera.
Salvo giro inesperado, el centrocampista volverá al España en cuanto el equipo de la Bundesliga deje claro que no quiere hacer frente a los 40 millones de cláusula, y a partir de ahí se encontrará con un Zidane que lo quiere fuera de su revolución. Pese a que James estaría dispuesto a rebajar sus pretensiones con los blancos, el galo recuerda la nula relación que tuvieron en el pasado y por ello se ha decantado por usarlo como moneda de cambio.
Una situación que deja al centrocampista en tierra de nadie y con una Copa América en el horizonte de su verano movido. Será con su selección donde el colombiano deberá volver a demostrar su mejor nivel, para así llamar la atención de los grandes equipos europeos y tener una buena baraja de opciones donde moverse.
James tiene contrato hasta junio de 2021 con el Real Madrid y será esto lo que usen los blancos para negociar una alta cantidad por su venta. La directiva de La Castellana tendrá en el centrocampista otro efectivo con el que hacer caja de cara a su cambio radical en el vestuario. Mientras, el jugador ya mira hacia un verano donde deberá buscar nuevo equipo a la vez que trata de conquistar la Copa América para su país.