Barcelona, 27 sep (EFE).- Los profesores de las universidades públicas catalanas cobran sueldos similares a los de los años 80 del siglo pasado, sin tener en cuenta la inflación, mientras que el porcentaje de temporalidad se situaba en el 51 % en el curso 2014-2015, once puntos más de lo que permite la ley (40 %).
El Observatorio del Sistema Universitario, un organismo independiente de las universidades, ha dado a conocer hoy en rueda de prensa en Barcelona este informe demoledor de la situación actual de las plantillas de Personal Docente e Ivestigador (PDI) de las universidades públicas catalanas entre los cursos 2004-2005 y 2014-2015, y ha analizado el número de efectivos, la temporalidad, retribuciones y edad de los docentes, entre otros indicadores.
La profesora de Matemáticas de la UPC, Vera Sacristán, y los profesores de Economía de la UB, Alfonso Herranz, y de la UAB, Paula Veciana, han presentado las conclusiones del informe, en el que se considera "inquietante" para el futuro de las universidades la reducción de las incorporaciones de personal predoctoral y posdoctoral a las mismas.
En cuanto a las retribuciones del personal docente e investigador, en términos reales, su evolución ha ido a la baja desde hace 25 años y se encuentran a niveles de finales de los años 80, se asegura en el informe.
En el caso de los catedráticos, la máxima categoría de profesor, en 2015 cobraron el 77,5 % de lo que recibieron en 1991, año en el que se produjo una reforma retributiva al alza en todas las universidades españolas.
A finales de los años 80 un catedrático, tipo medio, cobraba entre 25.000 y 30.000 euros, cifras que aumentaron a los 40.000 el año 1991, con la revalorización de los sueldos por parte de la administración, y que actualmente podría llegar hasta los 80.000 euros, incluidos todos los complementos del sueldo, como antigüedad o por docencia e investigación.
Esta última cifra, que puede parecer muy elevada en comparación con los sueldos de otras profesiones, equivale, según el informe del Observatorio del Sistema Universitario (OSU), a la retribución de los años 80, una vez descontada la inflación, una tendencia que se produce también en otras categorías docentes universitarios.
Por lo que se refiere al número de efectivos docentes, el estudio ha constatado un cambio de tendencia acusado y, en términos de personas equivalentes a tiempo completo, las cifras caen en picado el año 2010: un 19 %.
En total, los últimos cinco cursos -los más duros en cuanto a reducciones de subvenciones por parte de las administraciones y de reposición de plantillas-, los efectivos docentes e investigadores han caído en las universidades públicas catalanas un 23 %.
Por si esta reducción no fuese importante, en este mismo periodo el porcentaje de PDI estable ha pasado del 54,3 % al 48,7 % (curso 2014-2015), lo que significa que el restante 51 % tiene contrato temporal, un porcentaje que supera, "con creces", el máximo establecido por ley (40 % del total), ha indicado Sacristán.
En estos diez años, los contratos de ayudante docente prácticamente han desaparecido, el resto de contratos predoctorales ha sufrido recortes hasta el punto de que algún año no se han hecho convocatorias o han sido simbólicas y ha disminuido también la contratación de jóvenes investigadores por la vía de convocatorias estatales o autonómicas, que ha caído un 36 %.
"Como consecuencia de lo anterior, se constata un progresivo envejecimiento de la plantilla", se indica, ya que el porcentaje de PDI que tiene menos de 40 años se ha reducido del 30 % al 22 % y el que tiene 50 años o más ha aumentado del 36 % al 46 %.