MADRID, 15 (SERVIMEDIA)
El candidato de Izquierda Unida y Unidad Popular a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, aseguró este martes que cada voto en las elecciones generales del próximo domingo es esencial para seguir construyendo en las instituciones y en las calles la unidad de las clases trabajadoras.
Garzón protagonizó uno de los principales actos de la campaña electoral en el madrileño teatro de La Latina, en el que unas mil personas se quedaron fuera, según la organización. A pesar de las zancadillas y de los palos en las ruedas, a medida que se acerca el día de las elecciones estamos yendo a más.
Defendió una política que huya del espectáculo, porque lo exigible a los políticos no es que monten en bicicleta, bailen o hagan zumos de piña delante de las cámaras, sino que tengan soluciones para los problemas cotidianos de los ciudadanos y que debatan con otros de forma sincera y plural.
En este sentido, criticó el espectáculo del debate cara a cara entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, y subrayó el hecho de que sea analizado con metáforas de boxeo. La realidad no cabía en ese debate, denunció, en el que no se habló de desahucios ni de pobreza energética, por ejemplo.
Garzón hizo hincapié en la necesidad de recuperar la cultura, que en los últimos años ha tenido la bota del Gobierno siempre puesta encima, como herramienta de pedagogía para las clases populares y como base para hacer política en una época en la que cierto imperialismo cultural está colonizando la conciencia de esas clases trabajadoras.
Esa colonización, alertó, llega hasta el punto de alterar incluso la forma de pensa sobre la crisis económica. Nos han convencido de que no se puede rescatar la sanidad, la educación, a los desahuciados porque todo eso es de rojos, pero que hacerlo con aeropuertos sin aviones, autopistas sin coches o con el sistema financiero que generó la crisis es natural.
Defendió que la cultura nos hace libres y es esa formación la que permite combatir la precariedad permanente a la que el capitalismo quiere condenar a una mayoría social, haciendo compatible la bonanza macroeconómica y salarios millonarios con la miseria microeconómica y familias que no llegan ni al final de la semana.
Hemos sido expliados, saqueados de forma legal, denunció, mediante la privatización de más de cien empresas en las últimas décadas, la mayoría de ellas con beneficios, porque son de derechas pero no son tontos y su objetivo es privatizar las ganancias y socializar las pérdidas.
Apostó por recuperar la noción noble de la política como único instrumento de transformación social, y aseguró que el próximo domingo cada voto cuenta para tener grupo parlamentario propio y seguir construyendo la unidad popular en las calles y en las instituciones.
Garzón, que en sus mítines reivindica la trayectoria de quienes lucharon por los derechos que hoy disfruta su generación, bajó del escenario en un momento dado para dar un emotivo abrazo a Josefina, la viuda del histórico dirigente Marcelino Camacho.
En el acto participaron también Sol Sánchez y Enrique Santiago, que acompañan a Garzón en la lista al Congreso de los Diputados por Madrid, y también la eurodiputada Marina Albiol, todos ellos presentados por el activista Shangay Lily, maricón, feminista, anticapitalista, rojo y republicano.
(SERVIMEDIA)
15-DIC-15
CLC/gja
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