El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha asegurado que no habría aceptado el cargo si hubiera sabido que el acuerdo de estabilidad parlamentaria alcanzado con la CUP podía mutar. La CUP sólo salvará a Puigdemont si se celebra un referéndum unilateral.
En una entrevista este jueves en Catalunya Ràdio, ha señalado: "Si me hubieran advertido al inicio de que el acuerdo tenía que mutar, yo no me habría metido, así de claro. No creo ni que Artur Mas me lo hubiera propuesto".
Tras haber anunciado que se someterá a una cuestión de confianza después de agosto al no haber podido tramitar los Presupuestos, ha dicho que no solo interpelará a la CUP sino a todos los grupos del Parlament, para decidir si optan por "la regresión a un autonomismo tronado que no lleva a ningún sitio o se suman a un proyecto de innovación y progreso para Cataluña".
Ha defendido que la hoja de ruta está bien definida y no puede variar, solo mejorar, y ha asegurado que si pasa la cuestión de confianza, "nadie discutirá muchas cosas que ahora se pueden discutir, como la legitimidad" que tienen para seguir adelante con el proceso soberanista.
Ha afirmado que tomo la decisión de proponer la cuestión de confianza este fin de semana, en vista de que la CUP no retiraría su veto a los Presupuestos, y pensando que era "lo más saludable democráticamente".
Pacto de estabilidad
Sobre la incapacidad de pactar los Presupuestos, ha dicho que cuando hay un fracaso nunca es cien por cien culpa de uno, aunque ha matizado que "la responsabilidad de romper el acuerdo sí es del la CUP unilateralmente".
En ese sentido, ha considerado que la CUP "puede decidir tener otras prioridades" y que nada de lo que proponga JxSí le parezca adecuado para avanzar hacia la independencia, aunque ha reclamado que, ante esa postura, las entidades soberanistas se posicionen.
"Las entidades que movilizan a la buena gente de este país que quiere la independencia tendrán que aclarar si ahora es lo mismo o no votar a una opción o a otra".
Preguntado por si cree que la independencia ya no es el objetivo de la CUP, ha afirmado que "sus actos la alejan [de la independencia]", y hay votantes del partido que están sorprendidos.
Elecciones anticipadas
Puigdemont ha afirmado que la cuestión de confianza servirá para que si Cataluña tiene que ir a elecciones, "no obedezca a un capricho táctico de un presidente o de un grupo político que le da apoyo, sino que sea el Parlament del país" quien lo decida.
Preguntado por si concurriría como candidato para ser reelegido, ha reiterado que no lo hará si las elecciones son para crear un Parlament constituyente, aunque ha apuntado: "Si tenemos que interrumpir la hoja de ruta con la que me he comprometido, y creemos que hay que retomarla y completarla, inevitablemente es normal que me plantee presentarme".
El presidente catalán ha sostenido que en caso de unas nuevas elecciones, el apoyo al independentismo se debe contar en votos y no en escaños, aunque ha pedido medirlos "entre quienes quieren contribuir a redactar una nueva constitución, con todos los matices, y los que están radicalmente en contra". "Otras opciones, legítimas pero que no respondan a estas dos cuestiones, no entran en el baile de sumas y restas de votos", ha considerado.
Críticas de Mas
El expresidente catalán Artur Mas ha vislumbrado elecciones anticipadas en Catalunya y quiere que el actual jefe del Ejecutivo catalán, Carles Puigdemont, sea el candidato, descartándose así como posible cabeza de lista.
Mas también ha denunciado que en la CUP se ha impuesto la línea "dura, radical, intransigente, intolerante y que lo rompe todo" y ha dicho que con el líder de la CUP en la anterior legislatura, David Fernàndez, la posición de los antisistema "habría sido diferente".
En declaraciones a RAC1, Mas ha destacado el "cacao interno impresionante" que hay dentro de la CUP, que en las discusiones sobre los presupuestos se ha "dividido prácticamente por la mitad".
Según Mas, al vetar los presupuestos, la CUP ha incumplido el acuerdo de estabilidad firmado con Junts pel Sí y ha demostrado que "su palabra no vale absolutamente nada".
Mas ha comparado a los anticapitalistas con unos tripulantes armados con "hachas" que se dedican a "intentar hundir el barco" del proceso soberanista.
Respuesta de la CUP
La portavoz de la CUP en el Parlament, Anna Gabriel, ha expresado hoy su confianza en el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, pero ha indicado que los votos de su formación en la Cuestión de Confianza a la que se someterá en septiembre dependerán de su programa y de la concreción de la hoja de ruta.
En unas declaraciones a RAC1, Anna Gabriel ha dicho sentirse "responsable" de la decisión de la CUP de no retirar la enmienda a la totalidad de los Presupuestos y de que, en consecuencia, estos fuesen ayer rechazados por el Parlament.
Sobre la Cuestión de Confianza que anunció ayer el presidente Puigdemont para el mes de septiembre, tras considerar que el rechazo de los Presupuestos implicaba que había perdido la confianza de la cámara, Anna Gabriel no ha querido anticipar cuál será el sentido del voto de la CUP, pero ha confirmado que de nuevo será sometido a la decisión de las asambleas del partido.