Si pertenece usted a alguna de las asociaciones creadas en España en contra del canon digital, tenga cuidado. La SGAE puede estar tras sus pasos. Las agencias de detectives contratadas por la entidad que gestiona los derechos de autor están infiltrándose entre sus enemigos para intentar desactivarles y asegurarse el cobro del canon digital. Vea aquí la solicitud de adhesión.
De acuerdo con la documentación a la que ha tenido acceso elEconomista, agencias como Método 3, están creando sociedades fantasma desde las que asaltar a las asociaciones que luchan no sólo contra el canon, sino que han presentado también denuncias contra los autores.
Método 3, que se hizo famosa el año pasado después de ser contratada por la familia de la niña británica Maddie McCann, desaparecida en el Algarve portugués, ha creado, por ejemplo, la firma TG, con este objetivo. En los últimos años a través de esta empresa, domiciliada en la antigua sede social de Método 3, la agencia ha intentado, por ejemplo, infiltrarse en Apemit, una organización que agrupa a las pequeñas empresas y tiendas de informática y que se ha convertido en uno de las mayores enemigos de la SGAE.
Entre otras cosas, Apemit es la responsable de que el Tribunal de Cuentas abriera una investigación para esclarecer si la SGAE estaba financiando a partidos políticos o de que la Audiencia Provincial de Barcelona cuestione que las empresas y despachos profesionales tengan que pagar el canon, planteando una cuestión prejudicial ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas de Luxemburgo.
Control de la SGAE
Según explica Josep Jover, abogado de la asociación, "sabemos que la SGAE intenta vigilarnos de cerca y, por eso, cada vez que alguien intenta darse de alta en Apemit tenemos que realizar un control previo para que no haya ningún tipo de problema". Método 3, de hecho, no oculta ni la creación de sociedades fantasma ni el intento de integrarse en este tipo de organizaciones.
"Desde Apemit se dan instrucciones a las tiendas acerca de cómo esquivar el pago del canon digital y por eso para nosotros es muy importante estar dentro. Se trata de demostrar las irregularidades", asegura la agencia de detectives. Al margen de la asociación que defiende a las tiendas de informática, la SGAE lleva a cabo también un férreo control sobre la Asociación de Internautas, que ha denunciado a la entidad ante la Fiscalía Anticorrupción por presuntas prácticas delictivas en su gestión. "No tenemos ninguna duda de que nos están vigilando. Siguen nuestros pasos", denuncia Víctor Domingo, el presidente de esta asociación.
La SGAE rechaza hacer ningún tipo de valoración al respecto, aunque no oculta que esté contratando agencias de detectives para asegurarse el pago del canon digital. Su director de Relaciones Institucionales, Pedro Farré, aseguró el pasado fin de semana, después de que se supiera que la entidad había sido multada por grabar una boda sin permiso que "hemos contratado detectives y lo seguiremos haciendo porque hay sentencias que avalan la presentación de grabaciones como prueba en los juicios".
Grabaciones ilícitas
Método 3 no es, sin embargo, la única agencia a sueldo de los autores. Existen compañías más pequeñas que se dedican a grabar sin autorización y mediante cámaras ocultas fiestas municipales, bodas y comuniones.
Uno de los encargos más comunes es enviar a detectives a comprobar el tipo de música que se pincha en los bares ya que muchos son denunciados por no pagar el canon. "A nosotros nos decían directamente a qué lugares teníamos que ir y qué música debíamos comprobar si se pinchaba o no", explica una de las agencias contratada hace unos años por los autores, que prefiere guardar el anonimato.
Otro punto de mira es la red de redes. Internet se perfila como el medio más seguro para denunciar las prácticas de la SGAE por parte de los críticos y los autores han estrechado por eso el control.
Listados de internautas
Vigilan cada comentario que se vierte en la web e "incluso existen listados con aquellos internautas que mayores pasiones levantan, con las páginas más visitadas y con los que son considerados gurús en la lucha contra la gestión de la SGAE", explica una fuente cercana a la entidad. Hay que tener en cuenta que la página web de los autores ha sufrido en más de una ocasión ataques de hackers que han impedido el acceso a su página e incluso la han dejado 24 horas inutilizada, algo que no todos los críticos apoyan. Internet es también el lugar escogido para programar nuevas manifestaciones, concentraciones o recogidas de firmas frente al edificio que la entidad posee en Madrid.
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