Tranquilidad en el Bernabéu. Tranquilidad en el Real Madrid. José Mourinho seguirá. Al menos así se lo ha comunicado a sus dirigentes. En una reciente reunión celebrada con Florentino Pérez y José Ángel Sánchez (director general corporativo), el entrenador, al contrario que lo ocurrido en 2010, les confirmó que también seguirá en Chamartín para la 2012-2013, desoyendo, por tanto las ofertas de otros equipos de máximo nivel.
Dicho esto, todo es posible tratándose de José Mourinho. Que se lo pregunten al Inter de Milán. Cuando la relación entre portugués y club parecía más fluida que nunca, cuando el técnico incluso había preparado la pretemporada para el verano de 2010, 'The Special One' negoció con el Real Madrid y anunció su marcha al conjunto merengue. Lo hizo después de ganar el triplete. Si caen títulos esta primavera, nadie descarta una opción así.
Manchester United, Chelsea, PSG o el propio Inter de Milán han tanteado al de Setubal con ofertas mareantes. Ninguna como la del Anzhi ruso: 30 millones limpios por temporada. Sin embargo, Mou dijo no. Seguirá en el Real Madrid.
'El Confidencial' rebela este martes que el entrenador así se lo ha manifestado a los mandatarios merengues en un encuentro reciente celebrado bajo el formato de una cena de trabajo. "Presidente, tranquilo que voy a seguir. No tenga miedo", le habría prometido. El principal motivo para semejante compromiso es el grado de satisfacción adquirido en las últimas semanas por el preparador.
Tal y como relató EcoDiario.es, Mourinho es feliz, algo que le ha cambiado el carácter y le ha serenado el espíritu hasta convertirlo en un entrenador apenas polémico para lo que nos tenía acostumbrado. Diez motivos entre los que se encuentran su total control del club, su recién renovada buena relación con los jugadores o la mejor adaptación del plantel a sus sistemas.
Tal es el grado de satisfacción de Mourinho, que en ese encuentro se plantearon asuntos de cara al futuro más inmediato y lejano de los blancos.
El primero y fundamental, los fichajes. Salvo sorpresa o lesión, no habrá refuerzos en invierno, pero sí en verano. Florentino Pérez quiere una alternativa a Neymar y Mourinho no ve con malos ojos que llegue algún galáctico más. Dos o tres nombres extra serían los que completasen un grupo ya compacto en el que, además, podría haber salidas. Kaká o Higuaín fueron algunos de los nombres más mencionados.