El jugador blaugrana vio una tarjeta amarilla en el minuto 36 por protestar, y al borde del descanso cortó un posible contraataque del Madrid con una falta sobre Xabi Alonso.
La acción fue muy protestada por los jugadores del Madrid y por el público del Bernabéu, situación que Mourinho aprovechó para pedir más intensidad al público de la casa madridista, algo dormido tras el empate de Alexis.
Sin embargo, Fernández Borbalán no consideró que el argentino mereciese la amonestación por la falta que había cometido, por lo que el argentino pudo acabar el partido sin dificultades, ayudando a la victoria de su equipo.