Hernán Zin, uno de los dos periodistas que fueron agredidos y saqueados por la barra brava de Independiente, antes del partido contra el Racing describe en su blog cómo sucedió todo.
Cuando Jon Sistiaga y Zin estaban entrando en la tribuna popular del estadio de Independiente de Avellaneda, minutos antes de que comenzase el partido, Pablo Álvarez, el capo de la barra independiente y más conocido como 'Bebote', les cortó el paso prohibiéndoles la entrada.
A pesar de tener todos los permisos del club para estar allí, y de ir acompañados por dos policías argentinos, no cesó en su empeño: "Nos dijo que no podíamos estar allí y nos amenazó para que nos fuéramos", cuenta Zin en su blog. Hay que recalcar que 'Bebote' no ejerce ningún puesto de responsabilidad dentro del club, por lo que no tiene ningún tipo de autoridad.
Al ver que los dos periodistas tenían claro que no se iban a marchar, "fue cuando comenzó la agresión", por la espalda y en superioridad numérica. Les robaron la gran parte del equipo, e incluso Vichi, sargento de la policía de Buenos Aires que les acompañaba, afirmaba que pensó que no saldrían vivos.
Los altos cargos dejan de ser indiferentes
Según cuenta el periodista, "Javier Cantero, presidente de Independiente, ganó las elecciones del club en diciembre prometiendo que no iba a amparar ni financiar a las barras bravas. Lo que demuestra que las hinchadas empiezan a dejar de respaldar y admirar a los violentos."
En un curioso gesto, Álvarez ofreció su dimisión al presidente, algo que este no pudo aceptar pues 'Bebote' no ha sido elegido como líder de la barra de forma democrática, sino que lo ha conseguido gracias a sus actos violentos.
Cabe destacar, que Pablo Álvarez fue uno de los barras bravas expulsados de Sudáfrica por indeseables en el Mundial 2010.
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