El presidente del Tottenham, Daniel Levy, no da su brazo a torcer y se mantiene firme en las negociaciones. Le da al Madrid dos opciones para hacerse con los servicios de Gareth Bale, una sólamente económica y otra en la que a parte del dinero entraría la cesión de un canterano para abaratar la operación. Florentino ha expresado que 100 millones es una cantidad muy elevada, pero no sólo para un fichaje, "100 millones es mucho para todo".
El club inglés pidió la cesión de Álvaro Morata pero el Madrid quiere mantener al jugador por la escasez de delanteros que tiene la plantilla con la venta de Gonzalo Higuaín al Nápoles. Ante esta negativa, el objetivo de Villas-Boas está puesto en la otra perla de la cantera, en el canario de 20 años Jesé Rodríguez. Según el diario AS, hace unos meses el director deportivo del Tottenham, Franco Baldini, aseguró al entorno de Jesé que pujarían por él.
Si no puede ser Morata, que sea Jesé. Esta es la fijación de Levy que una vez más demuestra que es un duro negociador como ya lo hizo el año pasado con Luka Modric. Pero ambos canteranos ya han dicho en más de una ocasión que su intención es quedarse en el Madrid y, además, los dos están ilusionados con la oportunidad que les está dando Carlo Ancelotti. El Madrid ha dejado claro que va a dar confianza a Jesé renovando el pasado julio el contrato del canario hasta 2017.
Las negociaciones están en un punto muerto por la cantidad de dinero que pide el conjunto londinense. Levy manteniendo la cifra en los 120 millones de euros mientras que para Florentino los 100 ya le parecen demasiado. La idea del Madrid es incluir futbolistas de la primera plantilla para abaratar la operación. Di María o Coentrao serían los jugadores que ha ofrecido el Madrid pero el Tottenham sólo quiere a Morata o a Jesé.