Durante los últimos meses, el Real Madrid y los Ultras Sur han roto el acuerdo que convivencia por el que los radicales del Real Madrid tenían su propio espacio en el estadio Santiago Bernabéu y contaban con ciertos privilegios en el campo.
La guerra de poder abierta en el seno del grupo, en el que las nuevas generaciones quisieron ocupar el hueco de las vacas sagradas de los ultras, desembocaron en una pelea en las cercanías del Santiago Bernabéu que supuso el final de la buena relación con el club.
Desde ese momento, la grada que ocupaban los Ultras Sur en el estadio siempre ha estado a medio llenar después de que el Real Madrid diera de baja cerca de 250 abonos y se obligara a entrar en el estadio con el abono acompañado del DNI, lo que evitó el cambio de abonos habitual.
Florentino Pérez decidió en ese momento que se acababan las ventajas de los ultras y que la grada de los Ultras sur pasaría a ser una grada joven de animación que nada tendría que ver con el grupo ultra y ante el Celta, en el primer partido de enero, parece que podría inaugurarse como tal. Eso sí, también tendrá normas estrictas para todos aquellos que quieran un asiento, según publica SportYou.
El Real Madrid quiere evitar todo tipo de comportamiento violento y antideportivo por lo que para ello evitará de raíz cualquier pertenencia de personas conflictivas.
El Real Madrid introducirá un control dactilar de todos los asistentes para controlar a todo el que entra en el gradería y evitar posibles intentos de colarse en la grada. Además, están 'fichados' por la Policía que les controlará en el caso de que haya altercados.
Además de estas medidas a la hora de entrar al estadio, el Real Madrid firmará un contrato con ellos por el que se comprometen a no utilizar la grada como escenario para llevar a cabo acciones indecorosas.
Cinco ausencias al año
Además, los socios que falten a su localidad más de cinco partidos durante la temporada serán expulsados de la grada joven. El Real Madrid pretende lograr una grada similar a la que existe en el campo del Borussia Dortmund donde se crea un ambiente espectacular en cada partido.
Los responsables de la nueva Grada Joven han solicitado que se retiren las cristaleras que separaban a los Ultras Sur del resto de los aficionados, petición que por el momento no se ha tenido en cuenta por parte del Real Madrid, pese a que si el comportamiento de los aficionados es bueno, se retirará.