El Atlético de Madrid ya tiene nuevo portero. A falta de que se haga oficial, el balear de 30 años Miguel Ángel Moyá, actualmente en el Getafe, se convertirá en arquero rojiblanco por una cantidad cercana a los tres millones de euros.
Según cuenta la Cadena Cope, Moyá pasará reconocimiento médico la próxima semana y se transformará, así, en el segundo refuerzo de la temporada después de la llegada del joven ariete argentino Ángel Correa. Con esta incorporación, el equipo del Cholo Simeone se asegura la presencia de un guardameta de garantía para el año que viene, si bien se espera que no sea el único que aterrice en las próximas semanas en el Calderón.
Y es que a la más que probable salida de Courtois rumbo al Chelsea, habrá que unir también la marcha de Aranzubía, este año portero suplente del belga y hombre veterano que anhela de jugar más minutos en los últimos años de su carrera. De ahí que el Atlético esté peinando el mercado para incorporar un segundo guardameta. Keylor Navas gusta en las oficinas del Manzanares, pero no tanto en su banquillo.
Simeone prefiere otro estilo de portero y entre ellos se encuentra Willy Caballero (Málaga) Andrés Fernández (Osasuna) y, sobre todo, Gerónimo Rulli, cancerbero joven (22 años) que actualmente milita en Estudiantes de La Plata y por el que el cuadro colchonero estaría ya negociando un fichaje inmediato.
El interés de otros clubes europeos en esta figura emergente (se llegó a hablar del interés del Barça o de Manchester City) han hecho que el Atlético de Madrid haya pisado el acelerador para incorporarlo en las próximas semanas e incluso próximos días.