Es uno de los goles más inexplicables de la temporada futbolística. El porteró camerunés del Málaga, Carlos Kameni, protagonizó una acción que los aficionados de la Costa del Sol tardarán tiempo en olvidar.
En el partido en La Rosaleda ante el Valencia, y con los de Javi Gracia ganando por un gol a cero gracias al tanto inicial de los de Duje Cop, Kameni reaccionó erróneamente en una acción que costó el tanto del empate.
Se trató de un centro de Paco Alcácer desde la banda derecha, aparentemente sin peligro, toda vez que nadie llegaba por detrás con posición clara para rematar. Entonces, Kameni introdujo la mano tratando de desviar a córner, y lo que hizo fue palmearlo hacia su propia red.
El guardameta intentó justificarse asegurando que había recibido un pisotón de Denis Cheryshev en el área pequeña en el momento de intentar atacar el cuero.
De este modo, el portero dio el gol del empate al equipo de Gary Neville justo al filo del descanso en el coliseo malacitano.