Samuel Eto'o, ex jugador de Real Madrid, Mallorca, FC Barcelona, Inter de Milán o Chelsea entre otros, tiene por delante un muy complejo panorama judicial. El fiscal ha pedido para él una pena de 10 años y medio de cárcel por defraudar a Hacienda unos 3,46 millones de euros en los años comprendidos entre 2006 y 2009. Se le acusa de cuatro delitos fiscales por los que debería también pagar una multa de 14 millones de euros.
La información la desvela el diario El País. El rotativo ha tenido acceso al escrito en el que se desvela que Eto'o, al igual que otros futbolistas, empleó dos empresas pantalla (en su caso, una española y otra húngara) para tributar sus ingresos por el patrocinio de la marca deportiva Puma no mediante el IRPF -el 45%-, sino mediante un impuesto menor.
Eto'o fue uno de los primeros jugadores que investigó el Fisco español, pero en su caso, al contrario que en el de otros futbolistas, no devolvió la cantidad que se le reclama, lo que ha impedido que la fiscalía incluya este atenuante en la petición de pena de prisión.
Además de la posible cárcel, el fiscal también reclama que Eto'o abone unos cuatro millones de euros como responsabilidad civil, una cantidad que deberá ser afrontada de forma solidaria con su ex agente, Josep María Mesalles.
Eto'o y Mesalles mantienen desde hace tiempo una guerra por su relación profesional. El jugador acusa al representante de haberle quitado parte del dinero que ganó como jugador mediante acciones empresariales de las que Eto'o era ajeno.
El camerunés insiste en que también fue Mesalles el responsable del delito fiscal del que se le acusa. Él jugaba sólo al fútbol. El mismo argumento que ha utilizado la defensa de Messi para defenderse del delito por el que, finalmente, ha sido condenado.