Sergio Ramos, capitán del Real Madrid, ha querido enterrar el hacha de guerra con su compañero, Cristiano Ronaldo, al que acusó veladamente de 'oportunista' por afirmar que las ventas del verano habían debilitado a la plantilla. Lo ha hecho, eso sí, sin ocultar que hay diferencias entre ambos.
"Nunca ha pasado nada. Entre Cris y yo siempre ha habido una grandísima amistad. Somos dos jugadores con muchísimo carácter, con opiniones muy distintas, pero remamos en la misma dirección; a veces podemos tener algunas discrepancias en alguna decisión", ha insistido en una entrevista que ha concedido en TVE.
En lo que no dudó Ramos fue en apoyar a Cristiano y protegerlo de las críticas por su sequía goleadora en Liga (sólo dos goles en 14 jornadas). "Cuando Cris no marca parece que se arma un revuelo", dijo.
Esta tensión entre Cristiano Ronaldo y Ramos provocó que el portugués se negara a hablar con la prensa acabado el duelo contra el Apoel de Nicosia. El luso, en zona mixta, dijo que no atendería a los medios porque manipulaban sus palabras.
Tensión que llega con dudas no sólo en el rendimiento de CR7, sino también en lo que será de su futuro. El mismo futbolista ha filtrado su deseo de abandonar la entidad mientras en el Bernabéu no descartan abrir las puertas a alguno de los miembros de la BBC.