
Jesé Rodríguez fue de 2011 a 2013 una de las mayores perlas de la cantera del Real Madrid, pero el fútbol le ha dado un revés en cinco años difícil de explicar. De ser el goleador del Castilla y la revelación del primer equipo, el canario se acaba de quedar fuera de la lista para la Champions del PSG tras frustrase su fichaje por el Nantes.
A sus 25 años, edad en la que un jugador se encuentra en su mejor momento de forma, Jesé pasa por el peor de su carrera. Desde que se rompiese la rodilla en abril de 2014 en un partido de Champions con el Real Madrid ante el Schalke 04, el delantero no ha levantado cabeza y ha pasado por tres equipos diferentes sin mucho que destacar en ellos.
Su debut oficial con el primer equipo blanco llegó en diciembre de 2011 en la Copa del Rey, en marzo de 2012 entró por primera vez en un partido de LaLiga y, tras ser el máximo goleador del filial del Madrid en una temporada, el canario consiguió ficha de primer equipo para la 2013/2014. Durante el inicio de ese año consiguió ser una alternativa en ataque anotando ante Barcelona, Athletic o Atlético, pero cuando mejor estaba llegó el desafortunado lance en el minuto 3 ante el Schalke.
La lesión de rotura completa de ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha le tuvo alejado ocho meses de los terrenos de juego y, tras no contar con muchas oportunidades, en el verano de 2016, el club blanco decidió venderle al PSG. Pese a la confianza inicial de Unai Emery, Jesé sólo anotó dos goles en 14 encuentros con los parisinos y en invierno decidieron cederle a Las Palmas para que tuviese más minutos.
De regreso a su isla, el canario tampoco cuajó un buen papel bajo los mandos de Quique Setién y tras finalizar su cesión, el PSG decidió mandarle el verano pasado toda la temporada al Stoke City. En la Premier, de nuevo Jesé comenzó con buen pie, pero los problemas con el nacimiento de su hijo y sus líos extradeportivos acabaron por suponer que el conjunto inglés también renunciase a su ficha.
Este verano ha sonado para reforzar a varios clubes europeos, incluso llegó a tener hecha su marcha al Nantes el último día del mercado de fichajes. Las prisas, su alta ficha (alrededor de seis millones de euros brutos) y la no salida de un jugador del conjunto francés acabaron por truncar que tuviese nuevo club.
Jesé sigue perteneciendo al PSG, pero no ha entrenado todavía con ellos esta temporada, tampoco aparece en la web del club y su nombre no está entre los inscritos para jugar la Champions League. El canterano blanco deberá buscar la forma de seguir activo para encontrar otro equipo en invierno e impedir que, con 25 años, cumpla el ocaso de su carrera y pase de ser la esperanza de futuro del Real Madrid al ostracismo del fútbol.