Con Leo Messi todo es más fácil. El astro argentino solventó el partido ante el Levante, una de las revelaciones de LaLiga, con tres goles y dos asistencias para dar la victoria a su equipo por 0-5 y mantenerlo como líder en solitario ante la presión de Atlético, Sevilla y Real Madrid.
El equipo blaugrana se fue 0-2 al descanso, pero no cuajó una buena primera parte. A los de Valverde les costó meterse en el partido ante un Levante que le metió intensidad y solo concedió dos errores, vitales para el devenir del partido.
En el primero de ellos, Messi rodeó el área hasta encontrar a Suárez con una genial asistencia. El uruguayo voleó el balón y lo puso en la escuadra. El segundo, Busquets vio el hueco de la defensa y dejó solo a un Messi que no falló en el mano a mano ante Oier. Justo antes del 0-1, Boateng estrelló el balón en el larguero. Las cosas que tiene el fútbol.
Tras el descanso, el Levante bajó los brazos y adelantó varios metros la linea defensiva, lo que provocó multitud de espacios a la espalda de la defensa. Nada más empezar, Messi marcó el tercero tras una genial 'asistencia' de Suárez.
El Levante estaba muerto y aún restaba toda la segunda parte. Suárez, en otro momento de inspiración, le tiró un caño a su compatriota Cabaco y con el exterior mandó el balón al segundo palo, donde Vidal asistió a Messi para que hiciera su hat-trick número 43.
El Barcelona mandaba en el marcador por 0-4 y era el momento de Piqué. El central, que hizo un grandísimo partido en defensa, subió el balón y se dedicó a esperar la asistencia para, con mucha clase, batir a Oier por bajo.
El Levante siguió insistiendo, pero los disparos de Prcic, Morales y Toño los salvó Ter Stegen, que nunca le perdió la cara al partido pese a la exhibición de sus compañeros atacantes.