Partidarios y detractores del nuevo presidente de EEUU coinciden en señalar que su imagen, su discurso y su pose se adaptan a la perfección a un mundo dominado por las redes sociales, los mensajes cortos, los 'clicks' y los memes.
Aupado al poder, en parte, por el influjo de estos mecanismos que el candidato republicano ha sabido explotar, también ha tenido que asumir que la cascada de iniciativas virales en su contra ha sido incesante y sigue en auge.
Una de las últimas ideas más divertidas en este sentido ha surgido en torno a la web http://trumpdonald.org/, en la que es posible dañar el tímpano del nuevo inquilino del Despacho Oval con tan solo un golpe de ratón.
Aprovechando el juego de palabras en inglés entre Trump y trompeta (trumpet), los creadores de este site permiten que con cada pinchazo una trompeta le de un buen bocinazo al presidente de EEUU haste el punto de hacer mover su tupé.
La web incluye un contador de 'trumpetazos' que en el momento de redacción de esta información superaba ya los 381 millones de 'clicks'.