El británico Kazuo Ishiguro ha sido galardonado este jueves con el premio Nobel de Literatura 2017 por sus "novelas de gran fuerza emocional", que han descubierto "el abismo más allá de nuestro ilusorio sentimiento de conexión con el mundo", ha anunciado la Academia sueca.
Ishiguro es autor de ocho libros, entre las que destaca The Remains of the Day (1989), cuyo título en español es Los restos del día, pero más conocido como Lo que queda del día, que fue el elegido para la película protagonizada por Anthony Hopkins en 1993.
Los temas más recurrentes en su obra, explica la Academia sueca, son la memoria, el tiempo y el autoengaño. El galardonado también se ha adentrado en la ciencia ficción con su obra distópica Never let me go (Nunca me abandones, 2005) y en su último trabajo, The buried giant (El gigante enterrado, 2015), exploró "cómo la memoria se relaciona con el olvido, la historia con el presente y la fantasía con la realidad", explica el fallo.
Ishiguro nació en 1954 en Nagashaki y vivió en Japón hasta los cinco años, ya que en 1960 su familia se trasladó al Reino Unido, donde su padre trabajó como oceanógrafo. El escritor estudió Filología Inglesa y Filosofía en la Universidad de Kent y participó en un curso de escritura creativa en la Universidad de East Anglia, momento en el que empezó a publicar cuentos.
Su primera novela, A Pale View of Hills (Pálida luz en las colinas) fue publicada en 1982 y con ella obtuvo el premio Winifred Holtby Memorial, pero fue en 1988 con The Remains of the Day cuando se consagró tras ganar el Booker Prize.
Sucede en el Nobel de Literatura al poeta y cantante estadounidense Bob Dylan, el primer cantautor que obtenía este premio, una elección inesperada y no exenta de polémica que rescató a las letras estadounidenses dos décadas después del triunfo de la novelista Toni Morrison en 1993.
La dotación del Nobel es de nueve millones de coronas suecas (943.784 euros, 1,1 millones de dólares) después de que este año la fundación aumentara el monto de sus distinciones por primera vez en cinco años.
"El mundo está en un momento muy incierto"
Ishiguro ha asegurado que el galardón llega "en un momento muy incierto para el mundo, donde se ha puesto en cuestión sus valores, su liderazgo y su seguridad". En este sentido, se ha mostrado optimista respecto a que este "inmenso" reconocimiento pueda "servir, aún de una pequeña manera, para alcanzar algo positivo en el mundo".
El autor ha reconocido que en un primer momento pensó que su premio era un bulo, puesto que no había recibido la llamada de la Academia sueca cuando su nombre ya estaba circulando por los medios. "Pensé que era un bulo en estos tiempos de noticias falsas", ha señalado con humor.
De hecho, ha explicado que recibió la llamada de su agente -cuando estaba sentado en su cocina- para que le dejara escuchar en directo el anuncio de la academia, sin saber si ganaría. "Poco después, me llamó una señorita muy amable desde Suecia y me preguntó si quería aceptar el premio. Me sorprendió su tono ligero, era como si me estuvieran invitando a una fiesta", ha afirmado.
El autor británico ha defendido también su país de origen, Japón. "Siempre he dicho a lo largo de mi carrera que, aunque haya crecido y sido educado en este país británico, una gran parte de mi mirada al mundo y mi acercamiento artístico es japonés, porque provengo de una familia de allí", ha concluido.