Los premios Nobel nacieron de la voluntad del científico e industrial Alfred Nobel (1833-1896) de distribuir cada año el producto de su inmensa fortuna a personalidades que obraron en beneficio de la humanidad.
El inventor de la dinamita formuló esta voluntad en un testamento redactado en París en 1895, un año antes de su muerte. Según los términos de este testamento, unos 31,5 millones de coronas suecas, lo que hoy equivale a unos 1.500 millones de coronas (175 millones de euros), fueron destinados como capital, cuyos intereses debían ser redistribuidos cada año "a quienes en el transcurso del año pasado obraron en beneficio de la humanidad".
El testamento estipulaba que los intereses del capital invertido serían repartidos de una forma específica. "Una parte a quien haya realizado el descubrimiento o el invento más importante en el ámbito de la física; una a quien haya realizado el descubrimiento o progreso más notable en química; una a quien haya realizado el descubrimiento más importante en el ámbito de la fisiología o la medicina; una a quien haya producido en el medio literario la obra más destacada de tendencia idealista; y una parte a quien más o mejor haya actuado a favor de la fraternidad entre los pueblos, la abolición o la reducción de las armas así como la formación y difusión de congresos por la paz", reza el documento.
Legalmente, el testamento no designaba a un legatario de la fortuna. Así que, tras su lectura, en enero de 1897, algunos miembros de la familia Nobel lo rechazaron firmemente.
Además, Alfred Nobel designó los diferentes comités que atribuyen cada año los premios: la Academia sueca para la Literatura; el Karolinska Institutet, para la Medicina; La Academia real sueca de ciencias, para la Física y la Química; y una asamblea elegida por el Parlamento noruego para la Paz. Sin embargo, no explicó las modalidades que cada comité debía seguir para otorgar los premios en su disciplina.
Pasaron tres años antes de que el caso fuera resuelto: se decidió entonces nombrar como legataria una Fundación Nobel que manejaría el capital de los premio Nobel, mientras que los diferentes comités se encargarían de atribuir los premios.
En 1968, con ocasión de su tricentenario, el banco central de Suecia (Riksbank) creó un premio de ciencias económicas en conmemoración de Alfred Nobel, poniendo a disposición de la Fundación Nobel una suma anual equivalente al monto de los otros premios. Hoy, cada premio está dotado con un monto de 8 millones de coronas suecas (alrededor de 930.940 euros), que los ganadores deben compartir si son varios. bur-po/fc/bbc/meb/ahg