El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha bajado la cabeza y ha entrado al trapo de Artur Mas. Tras rechazar la lista única con CiU en el mes de marzo, ahora el republicano ha dado su brazo a torcer y ha aceptado que Convergència y ERC acudan a las elecciones autonómicas del 27 de septiembre unidas en una lista conjunta a favor de la independencia. A falta de que los órganos de gobierno de las asociaciones civiles proindepenedentistas aprueben este formato de lista, la victoria política se la ha adjudicado Mas.
Según lo que ha trascendido, la lista única proindependencia estará liderada por miembros de la sociedad civil catalana, sin vinculaciones políticas con CDC y ERC. Tras estas figuras, se colocarán en lugares preferentes Artur Mas (será cuarto, según El Periódico, recoge Europa Press), Oriol Junqueras (será quinto) y representantes de la ANC, Òmium Cultural y de la Asociación de Municipios Independentistas (AMI). La ubicación de cada uno de estos representantes y de los dos líderes políticos es un elemento que todavía debe definirse.
Otro punto que está por ver es si además de Mas y Junqueras, la lista estará formada por los actuales diputados de CDC y ERC o la representación de estas dos formaciones se limita a la presencia de Mas y Junqueras respectivamente.
Lo que parece decidido es que la CUP, el partido independentista más a la izquierda, no formará parte de la lista que quedará configurada como una especie de coalición entre CDC y ERC. En cualquier caso, la CUP no sería agresiva con esta lista unitaria e incluso se comprometería a darle apoyo tras los comicios para garantizar la mayoría independentista en el Parlament (la mayoría está en 68 diputados).
Tanto la CUP como Mas y Junqueras consideran que el papel que puede jugar este partido es más importante fuera de la nueva coalición ya que podrá restar más votos al frente de izquierdas que, previsiblemente, formarán Podemos e ICV y que podrían vencer en las elecciones de septiembre.
El cambio de ERC
El cambio de criterio de Junqueras respecto a la lista unitaria es justificado desde ERC por la ruptura de CiU, con la salida de Josep Antoni Duran i Lleida de la coalición y del Gobierno catalán. "Esa sería la prueba de fe que Junqueras esperaba para confiar en que Mas apuesta por la independencia de Cataluña de verdad", aseguran fuentes republicanas.
Otro elemento a tener en cuenta es una encuesta electoral publicada el fin de semana, en la que los partidos independentistas sólo alcanzaban la mayoría absoluta con una lista única (entre 68 y 70 diputados), mientras que por separado la suma de sus resultados se quedaba en unos 64 diputados. Hasta ahora, Junqueras siempre había defendido que los tres partidos independentistas tenían que acudir a las urnas por separado, ya que así obtendrían más diputados que unidos. Al final, la fórmula mixta de una coalición entre convergentes y republicanos con el apoyo de la sociedad civil y la CUP por libre es la fórmula que puede dar más escaños.
Ratificación interna
Una vez concluía la reunión vespertina, el Consell Nacional de ERC, reunido anoche de forma extraordinaria, avalaba por aclamación y con gritos de 'independencia' el acuerdo con CDC y las entidades soberanistas para ir juntos el 27S.
En un comunicado, el partido admitía que el aval había llegado tras un "intenso debate", y después de que Junqueras y la secretaria general de la formación, Marta Rovira, se encargasen personalmente de explicar a los consejeros nacionales el contenido del pacto con CDC y los detalles de las negociaciones.
Ambos defendieron que el acuerdo con CDC y las entidades soberanistas, que aún está pendiente de sellarse de forma definitiva, permitirá votar el 27S en unas elecciones claramente plebiscitarias y también servirá para que el día después de las elecciones se empiece a concretar la constitución de un "nuevo Estado".
El debate fue intenso porque la posibilidad de concurrir con CDC a los comicios era una posibilidad que los republicanos siempre se habían mostrado reacios: primero querían ir en listas separadas y después hacer una lista civil sin políticos, pero finalmente han desistido en ambos posicionamientos y aceptado la lista conjunta.
Así, el acuerdo ya tiene el aval de la dirección de CDC y del Consell Nacional de ERC, los dos partidos políticos implicados, y para que pueda ser ratificado de forma definitiva faltan el 'sí' de la ANC y Òmnium, que lo han valorado muy positivamente pero aun no han dado su aval completo.