Opinión

Rajoy lapida a sus contrincantes en un año que empezó en negro

  • La caída de Sánchez fue determinante para la supervivencia de Rajoy
  • Rajoy cuenta con el derecho a veto, la mayoría del Senado y el miedo de PSOE y C's
  • Podemos se quita la piel a tiras y sumerge al partido en una crisis interna
Mariano Rajoy, presidente del Gobierno. Imagen: Napi

Noche electoral del 20 de diciembre. Porcentaje arriba, porcentaje abajo, los números no le daban a Mariano Rajoy. El PP se dejaba unos cuantos pelos en la gatera y apenas conseguía amortiguar el golpe de una esmirriada victoria con 123 diputados.

Noche fatídica aquella. Algunas mentes bien pensantes se aferraron a cábalas descabaladas. Ciudadanos se irá con el PP -siempre había dicho hasta entonces que apoyaría al partido más votado-, y el PSOE se abstendrá porque no hay otra salida en una democracia que tiene a gala cumplir en la medida de sus posibilidades sus compromisos con Europa, que abstenerse. El PP lo haría en su posición. ¡Zarandajas!

Pero entonces Rajoy entró en modo pánico. Ante la más que probable circunstancia de perder la sesión de investidura en segunda votación, el presidente en funciones se abonó a la hipótesis de los que preferían hacer un feo al Rey antes que gastar cartuchos en quimeras imposibles.

Desconcierto en España. El partido ganador, con pírricos guarismos, dijo no al monarca y no al parlamento español. Y fue entonces cuando el jugador de basket, el socialista Pedro Sánchez, se animó a encestar canastas jugando a la gallinita ciega.

De repente, y fuera de guión, el que había llamado indecente a Rajoy salía a por todas. Henchido de orgullo por haber recibido el encargo del Rey, Sánchez comenzó a sentir la excitación que supone pisar ciertas alfombras. Si hoy mira lo que está pasando en Podemos, se dará cuenta de que su propósito era inútil.

Así que, sin tener que merecerlo, el verano de 2016 se asomó por la ventana con unas segundas elecciones tras meses de soporífero tedio, y sin visos de encontrar salidas. Para colmo, las encuestas arrojaban resultados similares. Tras pasar de nuevo por las urnas, y comprobar que el PP, lejos de deteriorarse, se envalentona y gana 14 escaños, Sánchez se reúne de nuevo con Rajoy, esta vez algunos minutos más, y sale de aquel encuentro asegurando que para él, ésta había sido una cita prescindible. A partir de ese momento, se entrega a la religión del 'no' sin más profundidad intelectual y política que su aversión al líder de los populares.

Con tanto 'no', el desdén se agarra a los lienzos del hemiciclo, a las calles, a sus aceras, se cuela en las tertulias de bar, en las reuniones de trabajo. Las familias se dividen en sanchistas y susanistas, en podemitas o abstencionistas, discuten los militares de base con sus barones. Podemos se deja por el camino un millón de votos. Y aunque el 'sorpasso' no llega, el PSOE se desinfla tras presenciar las jugadas de su líder. Ciudadanos sufre las consecuencias del gafe de Sánchez. Increíblemente, los votos, en un año bastante aciago para Rajoy, se escoran hacia el centro derecha de las nomenclaturas políticas.

Pero faltaba algo. Con Ciudadanos no suman, y el PNV andaba en elecciones y no le interesaba ni negociar con papel y calculadora. Y hte aquí que, los coroneles del Partido Socialista, llegado el mes de octubre, no aguantaron más. Sospecharon que Pedro Sánchez, por tercera vez consecutiva, estaba dispuesto a empujar al PSOE a otro precipicio, intentando adherir a su causa personal a los nacionalistas y Podemos, y perdiendo el poco crédito del que ya por aquel entonces gozaba.

El resto de la historia es conocida. Sin cimbrear la cintura, Mariano Rajoy ha logrado llegar a final de año lapidando a sus contrincantes. Apenas le quedan adversarios. Tiene en su haber el derecho de veto, la mayoría del Senado, la complicidad del PSOE, el apoyo de Europa, la necesidad de Ciudadanos de no repetir comicios y un Podemos que se quita la piel a tiras. "Tranquilos, que al final todo saldrá bien", dijo en el fragor del año Rajoy.

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Comentarios 3

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JESUS
A Favor
En Contra

GRANDE RAJOY !!!

Te querían quitar todos de en medio y han sido ellos los que han caído.

Que pase el siguiente por favor.

Puntuación 18
#1
Michelin
A Favor
En Contra

Con esos contrincantes no tiene mérito ser el mejor

Puntuación -5
#2
patriotismo
A Favor
En Contra

en serio apoyais a Rajoy? así va España, puedo entender que apoyeis unas ideas de derechas, pero apoyar a un señor que aparece 30 veces en los papeles de Barcenas me parece penoso..es como ir a la puerta de la carcel a apoyar a la Pantoja..

Puntuación -11
#3