El secretario general de la Liga Árabe, Nabil el Arabi, ha declarado este domingo a Irán responsable de los ataques de la semana pasada contra la Embajada de Arabia Saudí en Teherán en represalia a la ejecución del clérigo chií Nimr al Nimr por las autoridades de Riad.
Asimismo, El Arabi ha condenado la interferencia de Irán en los asuntos internos de Bahréin, que recientemente ha roto relaciones diplomáticas con la república islámica como gesto de solidaridad con el reino árabe.
A continuación, el ministro de Exteriores saudí, Adel al Jubeir, ha tachado el asalto a la Embajada como una flagrante violación de las convenciones y acuerdos internacionales, así como de interferencia en asuntos nacionales y de atacar la seguridad regional, según recoge la cadena panárabe Al Arabiya.
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