El ciclista Jan Polanc (Lampre-Mérida) se ha impuesto este miércoles en la cima del Abetone para ganar la quinta etapa del Giro de Italia, transcurrida entre La Spezia y este puerto de montaña sobre 152 kilómetros, en un primer final en alto de la ronda italiana que deja al español Alberto Contador (Tinkoff) como nuevo líder y propietario de la 'maglia rosa' tras el hundimiento de Simon Clarke (Orica-GreenEdge).
BARCELONA, 13 (EUROPA PRESS)
En el pelotón volvió a verse una dura guerra por llevar el ritmo entre el Astana de Fabio Aru y el Tinkoff-Saxo de Alberto Contador. Ambos probaron hacer saltar a corredores para ir por delante pero la persecución y vigilancia mutua lo impidió. No pudieron eliminar a la fuga pero sí soltaron al líder Simon Clarke (Orica-GreenEdge) a 5 kilómetros de meta, que perdió la 'maglia rosa' en favor de Contador, que entró cuarto en meta.
Y es que el de Pinto finalmente vio premiado con este liderato en la general provisional su gran ataque. Fue el primero de los tres grandes en atacar y poniendo en serios apuros a Fabio Aru (Astana) y a Richie Porte (Sky). Finalmente llegaron los tres juntos a meta pero, tras ser segundo Chavanel, entró tercero Aru para lograr 4 segundos de bonificación en meta. Contador fue cuarto y Porte quinto, con el mismo tiempo pero sin bonificaciones.
Contador hizo la selección en la subida final al Abetone, con un ataque muy duro a 4,5 kilómetros de meta que no fue una prueba sino todo un mazazo. Saltó rápido Aru y a su rueda fue Porte, pero les costó más de lo previsto llegar a Contador. Por detrás ya se quedaron Rigoberto Urán (Etixx-Quickstep), Juan Esteban Chaves (Orica) o Ryder Hesjedal (Cannondale), que sigue por detrás de su prometedor compañero y ganador de la cuarta etapa Davide Formolo.
Pese a que en las rampas más duras desapareció de nuevo Ivan Basso, y Contador solo tenía a Roman Kreuzigar como ayuda, no le hizo falta pues el madrileño decidió atacar y coger al toro por los cuernos. Casi descolgó a Aru pero la ayuda de Porte fue esencial para que los tres favoritos llegaran juntos a meta, pero con mejores sensaciones para el español y el australiano. También fue destacable el gran papel del vasco Mikel Landa en la ayuda a Aru.
Tras cinco etapas Contador ya viste de rosa, aunque tiene a escasos 2 segundos a Aru y a 20 a Richie Porte. Sin contar a Kreuziger o Cataldo (Astana), escuderos de lujo de sus líderes, Contador ya tiene a 37 segundos a Chaves (Orica), a 56 segundos a Giovanni Visconti (Movistar) o a 1:15 a Davide Formolo (Cannondale). A 1:59 entró Rigoberto Urán, quien podría estar sufriendo los efectos de una indisposición pero quien tuvo mejores piernas que el martes.
De nuevo fue una etapa rápida y con espectáculo, confirmando que este Giro está además de vistoso igualado por lo menos en cuanto a los tres primeras espadas que parece que pugnarán por suceder a Nairo Quintana como vencedores de la ronda transalpina en Milán. De momento, Contador tendrá la presión tras su ambicioso ataque en el Abetone, primera toma de contacto con la montaña y primera piedra de toque para todos.
Más allá la jornada estuvo marcada por la escapada integrada por Axel Domont (Ag2r La Mondiale), Serghei Tvetcov (Androni Sidermec ), Silvan Dillier (BMC), Sylvain Chavanel (IAM) y Jan Polanc (Lampre Merida). De ellos los más fuertes fueron Polanc y el veterano Chavanel, que finalmente no pudo con la exhibición del joven esloveno de 23 años, en una gran subida que le permite lograr su primer triunfo parcial en una grande tras ser segundo en la Vuelta a Eslovenia de 2013.
La fuga se formó en los primeros kilómetros de la etapa y estuvo unida y bien compenetrada hasta la ascensión final. Tras superar bien el primer escollo montañoso, el Foce Carpinelli (3ª categoría) en el kilómetro 57,6, no se desataron las hostilidades entre ellos hasta las primeras rampas de Abetone. El primero en ceder fue Tvetcov, también Domont y finalmente Dillier, dejando a Chavanel solo en la persecución de Polanc, el más fuerte.
De cara al jueves la sexta etapa de la ronda italiana partirá de Montecatini Terme y llegará a Castiglione Della Pescaia tras 183 kilómetros, en una jornada llana con un único puerto puntuable, el de Pomarance (4ª), donde a buen seguro el pelotón intentará anular las fugas para la disputa de la etapa al sprint, en una de las pocas jornadas que permitirán el lucimiento de los velocistas.