El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha supeditado este miércoles que Cataluña tenga unos Presupuestos que permitan aplicar el plan de choque social y afrontar las necesidades de los catalanes para mantener el Estado de bienestar a que el Gobierno no "tenga secuestradas" partidas que ya debería haber pagado a la Generalitat.
Lo ha dicho durante la sesión de control al Govern en el Parlament, en respuesta al diputado de la CUP Joan Garriga 'Nana', que le ha preguntado qué medidas tomará para que las cuentas estén a la altura de los compromisos que ha adoptado su ejecutivo y, en concreto, le ha preguntado por la renegociación de la deuda catalana.
Puigdemont ha incidido en que, al margen de la renegociación de los intereses de la deuda, la Generalitat "seguirá reclamando el secuestro del dinero que ya es de los catalanes para que pueda disponer y atender sus demandas".
El diputado de la CUP le ha preguntado por una deuda a corto plazo de la Generalitat contraída con el BBVA que asciende a 100 millones de euros y que está en situación de impago, por lo que genera intereses de demora contra la administración catalana, y también le ha preguntado si hay deudas similares y cómo piensa afrontarlas.
El presidente ha reconocido la existencia de esa deuda y le ha explicado que en ese momento no tenía la información sobre más deudas del mismo tipo, pero que pondrá a su disposición toda la información que el diputado requiere.
"Efectivamente algunos de los créditos a corto plazo han entrado en impago. Tristemente, es la consecuencia de la tensión de tesorería que nos obliga la situación que ya conocen", ha contestado, cargando la responsabilidad de la falta de liquidez de la Generalitat sobre el Gobierno central.