El Senado ha creado este martes la Diputación Permanente tres meses después de la constitución de las Cortes Generales surgidas de las elecciones generales del 26 de junio. Al contrario de lo que sucedió las dos legislaturas anteriores, en esta ocasión la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá no tiene un puesto en este órgano, que es el que da continuidad al Parlamento entre periodos de sesiones y entre legislaturas.
De este modo, el Senado ha cerrado la lista de senadores que ocuparán un escaño en la Diputación Permanente poco antes de la investidura de Mariano Rajoy, que se celebrará esta semana, y de que se cumpla el plazo para la disolución de las Cortes del 26J.
Esta legislatura, 37 senadores son miembros titulares de este órgano contando con Pío García-Escudero como presidente: 21 son del PP, ocho del PSOE, tres de Podemos, dos de ERC, uno del PNV y dos del grupo mixto. Así pues, con respecto a la composición de la Diputación de la pasada legislatura -formada por 36 senadores-, el PP y ERC ganan un puesto.
Los 'populares', que cuentan con la mayoría absoluta en el Senado, han ubicado a Edelmira Barreiro y a María del Mar Angulo. Deja este órgano Paula Prado, que es ahora diputada en el Parlamento gallego.
Por su parte, el PSOE tiene ocho miembros titulares en la Diputación Permanente, mientras que la pasada legislatura contaba con nueve. Juan María Vázquez -que entonces era miembro titular- ha pasado a ser suplente, igual que el exportavoz Óscar López, quien intercambia el puesto de titular su sucesor en el Grupo Socialista, Vicente Álvarez Areces.
Unidos Podemos y el PNV mantienen el número de sitios con respecto a la legislatura anterior y el Grupo Mixto aumenta uno, pero lo ocupa Josep Lluis Cleries, que antes lo tenía como portavoz de CiU, que esta legislatura no cuenta con grupo propio.
Todos los senadores que tengan un puesto en la Diputación Permanente conservan la condición de senadores aún después de expirado su mandato o disuelta la Cámara. Con ello, ninguno perderá el aforamiento en el caso de que se disuelvan las Cortes por una nueva convocatoria de elecciones generales.
En la pasada legislatura, el PP ubicó en la Diputación Permanente a Barberá, decisión que fue muy criticada por la oposición porque "blindaba" a la senadora, que entonces estaba en el punto de mira de las investigaciones de la operación Taula, relacionada con el supuesto blanqueo de capitales cometido por el grupo municipal popular del Ayuntamiento de Valencia.
Finalmente, en el mes de septiembre el Tribunal Supremo abrió causa contra ella por blanqueo de capitales, tras lo que se dio de baja en el PP y se integró en el Grupo Mixto, pero no dejó su acta en el Senado.