Mucho han cambiado las expectativas en los dos meses que han pasado desde que Patxi López se postulara como candidato a las primarias del PSOE. El vasco se adelantó a Pedro Sánchez para tener ventaja y ganarse el apoyo de la militancia y de algunos exministros, pero la estrategia no ha funcionado. Susana Díaz ve cómo Pedro Sánchez le triplica en las encuestas entre votantes del PSOE.
La escasa asistencia a los mítines, nunca superior a 300 militantes, indica que el discurso de López no ha calado en las bases.
Tampoco los esfuerzos de Óscar López y César Luena por captar a exdirigentes socialistas han funcionado.
Y por si esto no fuera suficiente, las deserciones de Rafael Simancas y Francina Armengol, que han fichado por Sánchez, dejan a López en cuadro.
"Estamos decepcionados porque no se han logrado los objetivos marcados al principio de la campaña", corroboran desanimados gente del equipo del exlehendakari.
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