París, 14 sep (EFE).- Omnipresente en la vida política y social de Francia, con una sobreexposición criticada por la oposición, el presidente Emmanuel Macron expande ahora su protagonismo como imagen de una tienda de productos de marketing con la que el Palacio del Elíseo quiere costear su renovación.
Tazas, carteles, camisetas o lapiceros, con un cuidado uso del rojo, blanco y azul de la bandera tricolor, escenifican ese salto comercial en el que participan de momento una quincena de marcas, como BIC, Duralex, Le Slip Français o Pierre Hermé.
No todos los productos tienen la fotografía del mandatario, pero su retrato oficial o algunas de sus expresiones más sonadas, como "Croquignolesque" (irrisorio) o "Poudre de perlimpinpin", que utilizó para referirse a algo supuestamente milagroso pero ineficaz, compiten por hacerse con el favor del público.
Junto a ellos, otra imagen icónica de su mandato: su ya célebre muestra de euforia durante el Mundial de Rusia -cuando abandonó su asiento en la tribuna y alzó el puño exultante tras un gol de los "bleus" frente a Croacia- ha quedado estampada en una camiseta.
Macron se ha convertido en el mejor embajador de la tienda, que por ahora es sólo virtual. El reloj con los colores de la bandera nacional que ha exhibido en recientes comparecencias públicas está igualmente a la venta en la web, por 169 euros.
Entre los cerca de 60 productos disponibles hay precios para todos los bolsillos: una postal con su retrato puede adquirirse por dos euros, pero un brazalete de oro con una de las tres palabras -Libertad, Igualdad, Fraternidad- que conforman el lema de la República se eleva hasta los 250.
La marca "Elíseo" aparece grabada en bolsos de tela de 15 euros, lapiceros o libretas, así como en un cofre de "macarons", delicado postre del que Hermé es uno de los principales exponentes, y el nombre "Presidente" o "Primera dama" decora camisetas.
La tienda digital se estrenó hoy y este fin de semana, coincidiendo con las Jornadas Europeas del Patrimonio, un puesto efímero en el patio del palacio presidencial también recaudará fondos, que irán destinados a su restauración.
"El Elíseo es una vieja dama de 300 años. Lugar de nuestra memoria colectiva, es también un espacio que vive cada día al ritmo del presidente de la República y de las 800 personas que trabajan a su lado. Nuestro deber es preservar este patrimonio porque es el vuestro", asegura la Presidencia en su página web.
El palacio fue construido y decorado entre 1718 y 1722, y la Asamblea Nacional estableció por decreto en diciembre de 1848 que sirviera como residencia oficial del presidente.
Con la línea de productos lanzada hoy, el Elíseo se suma a otras grandes instituciones que ya explotan ese filón, como la Asamblea Nacional francesa, la Casa Blanca estadounidense o la Casa Real británica.
Aunque la idea comercial no es nueva, ya que bajo el mandato del conservador Nicolas Sarkozy se registró en 2010 la marca "Presidencia francesa", su ambición supera a la de su predecesora y ediciones limitadas para acontecimientos o fechas señaladas, como las Navidades, podrían agrandar en un futuro la oferta.
La Presidencia explica en la web que, más que una etiqueta, este "Made in France" del que hace gala cada producto supone también un espaldarazo para las empresas del país, trabajo para los ciudadanos y un reconocimiento a la excelencia de las artes locales.
"Más que la calidad de los productos, el 'Made in France' a menudo es la historia de tradiciones transmitidas de generación en generación", concluye sobre este proyecto.