Barcelona, 26 nov (EFE).- Los comunes han exigido hoy al Govern, entre sus condiciones para apoyar los presupuestos de la Generalitat, aumentar el gasto en 1.700 millones de euros e incrementar el IRPF a las rentas que superen los 90.000 euros anuales, algo que ERC ve "con buenos ojos", aunque no así el PDeCAT.
En el marco del inminente inicio de las negociaciones para pactar los próximos presupuestos catalanes, Catalunya en Comú-Podem ha puesto hoy sus cartas sobre la mesa al hacer públicas sus prioridades presupuestarias "de mínimos" para revertir la que han calificado de "degradación de los servicios públicos" en Cataluña.
Un decálogo para encarar las negociaciones que pasa por aumentar el gasto de la Generalitat en unos 1.700 millones, que procederían de la aprobación de las cuentas estatales, una reforma fiscal y la lucha contra el fraude.
Así lo han explicado en una rueda de prensa en el Parlament la presidenta del grupo Catalunya en Comú Podem, Jéssica Albiach, y el diputado David Cid.
De estos 1.700 millones de euros más de gasto, entre 600 y 700 millones deberían derivar de una "reforma fiscal progresiva" especialmente en IRPF y sucesiones; aproximadamente un tercio de la lucha contra el fraude fiscal; y algo menos de un tercio de los recursos que prevé para Cataluña el acuerdo sobre los presupuestos generales del Estado al que han llegado el Ejecutivo socialista y Unidos Podemos.
Los comunes han calificado así de "incomprensible" la negativa de los grupos independentistas de apoyar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y han advertido de que sin la aprobación de éstos será "imposible" que las cuentas catalanas sean "expansivas".
Por otro lado, han reclamado al Govern que incremente el IRPF a las rentas que superen los 90.000 euros brutos anuales -que calculan que perciben solo el 2 % de catalanes- y lo sitúe en el 23,5 %, porcentaje que ahora se computa a partir de los 120.000 euros; y han propuesto que el tipo máximo (25,5 %) que se aplica ahora a partir de los 175.000 euros se rebaje hasta los 120.000.
Unas propuestas de los comunes que ERC ve con "buenos ojos", según Marta Vilalta, portavoz de la formación republicana, que ha dicho que su partido desea analizarlas en las negociaciones que arrancarán de forma "inminente" ya que Esquerra ha defendido siempre "una fiscalidad más justa y redistributiva".
Sin embargo, el presidente del PDeCAT, David Bonvehí, ha avisado de que su formación no avalará un proyecto de presupuestos para la Generalitat que incremente la presión fiscal, "especialmente a las clases medias", y lo ha situado como una "línea roja".
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo Nacional del PDeCAT, Bonvehí ha precisado que si la subida del IRPF "solo afecta al 2 %" de catalanes lo estudiarán, pero ha agregado: "Tenemos que ser coherentes con lo que hemos defendido en las últimas propuestas de reforma del IRPF en el Congreso".
"Si el precio del presupuesto tiene que ser que cambiemos nuestro modelo social o si tenemos que renunciar a nuestro proyecto político de seguir avanzando hacia la república, creo que como PDeCAT tenemos que decir que no estamos de acuerdo", ha recalcado Bonvehí, que ha precisado que esta postura no se ha consensuado con JxCat.
Precisamente, Junts per Catalunya no ha querido entrar en aspectos concretos de las cuentas ni sobre la propuesta de los comunes, pues ha indicado que ya hará manifestaciones al respecto una vez que el Govern presente su plan presupuestario.
Aun así, el portavoz adjunto de JxCat Eduard Pujol se ha mostrado confiado en que serán "unos presupuestos más expansivos", en los que "se comiencen a revertir las restricciones de los últimos años" y con los que se pueda "construir, construir y construir" sin dejar de lado "la situación de excepcionalidad" financiera de la Generalitat y las "limitaciones" estatales.
Pujol ha achacado además a la suspensión del autogobierno catalán, por vía de la aplicación del artículo 155, que el Govern aún no haya presentado los presupuestos que, ha asegurado, mostrarán el "alma social" del ejecutivo y serán "expansivos", ha insistido.
Por el contrario, el secretario de Organización del PSC, Salvador Illa, ha instado a PDeCAT y ERC a que den un "sí sin matices" a los presupuestos del Estado que suponen "2.200 millones de euros más para Cataluña" y pueden ayudar a "paliar" las carencias de la sanidad en atención primaria que han llevado a la huelga de esta semana en Cataluña de los profesionales de ese sector.
Para el dirigente socialista, el proyecto de cuentas generales supone 2.200 millones de euros más que "beneficiarían a muchos catalanes" y que supondrían "mayores ingresos para destinarlos a revertir políticas de austeridad en Cataluña".
Desde Ciudadanos, el diputado Nacho Martín Blanco ha criticado que el independentismo viva en su "república imaginaria" en lugar de afrontar los "problemas de la Cataluña real" como la sanidad, y ha avanzado que su partido pedirá al Govern que incremente al 25 % la partida presupuestaria para atención primaria.