El presidente del PP, Mariano Rajoy, admitió hoy que presentaría una moción de censura contra el Gobierno socialista si tuviera los suficientes apoyos parlamentarios pero, dado que no es así, añadió que éste no es "momento de ocurrencias" sino de que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, explique en el Parlamento sus planes para salir de la crisis. Ana Palacio cuestiona la estrategia de Rajoy.
"Yo no tengo confianza en el señor Zapatero pero si tuviera una mínima posibilidad de ganar la moción la presentaría", confesó el líder de los 'populares' en una entrevista en TVE. A su entender, hay "opiniones para todos los gustos" hablando de adelanto electoral o mociones de censura pero "éste no es momento de ocurrencias" porque "ya hay bastantes incertidumbres y desconfianza" en la economía español.
Congelación y nuevo contrato
Entre las medidas que Rajoy propone para salir de la crisis llama la atención una hasta el momento no pronunciada por él: congelar los sueldos de los funcionarios para reducir el déficit, una medida que ya se puso en marcha en la primera legislatura de Aznar.
Rajoy también ha mostrado su preocupación por el mercado de trabajo y ha dicho que la prioridad es terminar con la temporalidad, que afecta "a más del 30%" de los contratos. En opinión de Rajoy, el problema es que los empresarios prefieren contratar "a los que su despido cuesta cero días", es decir, hacer contratos temporales que no precisan de indemnización por despido. Para el líder del PP, habría que fijar las cuantías por despido dependiendo del tiempo trabajado en la empresa.
En este sentido Rajoy ha abogado por un nuevo contrato cuya indemnización podría aumentar progresivamente dependiendo del tiempo que la persona lleve trabajando, y ha apuntado a la posibilidad de que a los cuatro, cinco o seis años la indemnización alcanzaría los 33 días
Rajoy ha recordado que en estos momentos existe un contrato de 45 días de indemnización, uno de 33 -para colectivos de difícil inserción laboral- y otro de cero.
Privatizar servicios
En el mismo sentido, el presidente del PP también aboga por privatizar los servicios de empleo y por lograr una "negociación colectiva más flexible"que se adapte a cada empresa. "No es lo mismo la Seat que una pyme", ha asegurado.
Rajoy ha querido salir así al paso a las críticas de pasividad lanzadas desde algunos sectores de su partido y medios de comunicación. El presidente del PP ha asegurado que su grupo ha presentado multitud de propuestas tanto en el Congreso como en el Senado pero que han sido rechazadas por la mayoría que apoya al Gobierno.
Sin conspiración
Además, Rajoy criticó las declaraciones del ministro de Fomento, José Blanco, por insinuar que hay una especie de "conspiración judeo-masónica" contra el Gobierno, algo que, calificó de "absurdo". Por eso, pidió a los miembros del Ejecutivo mantener "una actitud prudente" y "un poco de rigor".
"Ayer dijo Blanco que había una conspiración contra la economía española, lo que es algo verdaderamente notable. Celebro que le haya corregido el secretario de Estado de Economía. Hay que hablar con un poco de rigor", subrayó.