Renfe cumple 80 años en un momento en el que su situación presenta numerosos retos a futuro con los que enfrentarse. La pandemia causada por el Covid-19 ha lastrado los resultados de la compañía, que ha cerrado el ejercicio del 2020 con unas pérdidas de 479,1 millones. Parte de culpa ha tenido las restricciones de movilidad, como demuestra que la joya de la corona, la alta velocidad, tan sólo haya transportado 7,6 millones de pasajeros, un 63% menos que en 2019.
El Comité General de Empresa de Adif, formado por UGT, CCOO, SCF, CGT y SF, ha convocado siete días de paros parciales para protestar por la falta de personal y "privatización de servicios" y exigir al gestor que cumpla con sus compromisos de reposición de más del 110%.
El presidente defiende en la inauguración del AVE con Madrid a Elche y Orihuela la infraestructura ferroviaria para reforzar la cohesión territorial y que "ningún territorio quede atrás". Sánchez sigue confiando en la vacunación "para posibilitar la recuperación económica" en los próximos meses.
El gigante chino CRRC ha presentado por todo lo alto un prototipo del tren maglev, que es capaz de circular a 620 kilómetros por hora (km/h) y que sueña con superar los 800 km/h. Con este vehículo, que funciona con tecnología de levitación magnética, China busca batir a Japón, que en 2015 estableció un récord mundial de velocidad cuando Japan Railway alcanzó los 603 km/h con su prototipo Maglev L0 Serie en una pista en Yamanashi. No en vano, en 2019, el fabricante del gigante asiático ya presentó al mundo un tren maglev capaz de desplazarse a 600 km/h.
El Consejo de Ministros, en su reunión de este martes, ha autorizado al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana a licitar, a través de Adif, las obras del proyecto de instalación de la línea aérea de contacto en el tramo Zaragoza-Teruel con un valor estimado de la licitación de 42.588.953,79 euros, IVA no incluido.
Las constructoras han multiplicado sus reclamaciones a Adif en plena pandemia por discrepancias en las obras del AVE. Una situación que ha llevado al gestor ferroviario a aumentar las provisiones por estas disputas más de un 20% entre enero y septiembre de 2020. De este modo, la compañía pública asume riesgos asociados a estos litigios, que se dirimen en vía contencioso-administrativa, por más de 803 millones de euros, frente a los 664 millones que registraba al cierre de 2019.
Tras casi un año de restricciones a la movilidad, desplome de la demanda y pérdidas millonarias, Renfe ha decidido retrasar al primer semestre de 2021 el cierre de la macrocompra de trenes de Cercanías y Media Distancia. El operador ferroviario, que se comprometió a resolver el grueso de las licitaciones en la segunda mitad del año, finalmente sólo ha adjudicado a Caf la compra de 31 trenes de Ancho Métrico por 258 millones, dejando para el año que viene la adjudicación de contratos valorados en unos 4.817 millones.
Adif prepara la puesta en marcha de 400 ferrolineras en España. El gestor ferroviario está buscando promotores para estas instalaciones y prevé que alcancen una potencia de hasta 500 kW, lo que supondría un récord en nuestro país, frente a las que ya hay en operación en las estaciones de servicio de Repsol o Cepsa, que tienen una potencia máxima de hasta 350 kW.
Orlando Figes ilustra con brillantez y hondura en su libro Los Europeos cómo en el siglo XIX se erige el ferrocarril como fuerza democratizadora. Revolucionó el sentido europeo del espacio y el tiempo, impulsó la circulación internacional de personas y bienes, transformó la economía y la cultura, y acortó las distancias que separaban a los hombres.
Adif ha licitado el contrato de servicio para la redacción del proyecto de construcción para la remodelación integral de la estación de tren del municipio zaragozano de Grisén, cuyo principal objetivo es mejorar la capacidad operativa y la funcionalidad de la explotación ferroviaria de las instalaciones.
La Unión Europea (UE) y el Gobierno de España han lanzado un plan de hidrógeno verde muy ambicioso con el que buscan "alcanzar la neutralidad climática" e impulsar la reactivación económica tras la crisis del coronavirus, que ha dañado la industria y hundido el turismo y el transporte.
Ya está dado el primer paso para automatizar, a través de drones, la inspección de los más de 15.000 kilómetros de la red ferroviaria española. El mérito corresponde a las compañías Adif y a las tecnológicas de Telefónica, Ineco y Huawei. Todo empieza con un proyecto piloto desarrollado en la comunidad gallega. Si los resultados son los esperados, nada impedirá extender la iniciativa en todo el país a lo largo de los próximos años, en cuanto la cobertura del 5G alcance al conjunto del país, incluidas las zonas más remotas.
Leopoldo Maestu llegó en mayo a la presidencia de Alstom España, en plena pandemia del Covid, con dos objetivos claros: impulsar la empresa en medio de una crisis que ha dañado profundamente la economía, y que nuestro país no se quede fuera de la apuesta del grupo francés por los trenes de hidrógeno, tecnología que ya está implantando en Alemania, Holanda, Austria o Reino Unido. Así, además de pujar por los concursos de Renfe y mirar a Portugal, está "reuniendo un grupo de empresas para presentar un proyecto asociado al hidrógeno en el ferrocarril" con el que busca tener acceso al fondo de recuperación Next Generation EU. "Apostamos por que en tres o cuatro años el ferrocarril se convierta en una industria de uso de ese hidrógeno verde que se va a generar", asegura Maestu, ingeniero industrial.
Renfe tiene previsto mantener intacta su oferta en los próximos meses pese a que el cierre de las comunidades autónomas y las restricciones a la movilidad han hundido más su demanda, que lleva a la baja desde mediados de agosto, cuando empezó la segunda ola de coronavirus.
Adif ha más que duplicado sus pérdidas en los nueve primeros meses del año debido al impacto que el coronavirus tiene en la movilidad. En concreto, el gestor ferroviario ha registrado unos números rojos de 506 millones de euros hasta septiembre frente a los 234 millones que perdió en el mismo periodo del año pasado. Ver: Renfe se aleja de la recuperación y pierde 333 millones.
Adif y su filial de Alta Velocidad perdieron 506 millones de euros en los nueve primeros meses del año, frente a las pérdidas de 234 millones de euros registradas en el mismo periodo del año anterior, como consecuencia de la drástica reducción de las operaciones ferroviarias en el país a causa de la pandemia.
Los presupuestos "más ambiciosos" del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana han puesto a Adif ante el reto de tener más que duplicar su ritmo de inversión en plena pandemia del coronavirus y oleada de restricciones a la movilidad. Las cuentas del departamento que dirige José Luis Ábalos asignan un presupuesto de 4.703 millones de euros al gestor ferroviario para que modernice la red convencional y amplíe y mantenga las líneas de alta velocidad.
Adif y Adif Alta Velocidad (Adif AV) han completado la definición del modelo de desarrollo para la promoción de puntos de recarga eléctrica (PRE) rápida de vehículos en estaciones. En Aragón, estas instalaciones podrán implantarse en 41 estaciones, 33 en la provincia de Zaragoza, 6 en la de Huesca y 2 en la de Teruel.
El tráfico de pasajeros de alta velocidad ha caído un 73% en septiembre en comparación con el mismo mes del año pasado por la crisis del coronavirus. Una cifra que responde a la decisión de Renfe de reducir a menos de la mitad la oferta y a la baja demanda (la ocupación ronda el 30%). El desplome del tráfico de trenes también se ha reflejado en las cuentas de Adif, cuyos ingresos acumulan un descenso del 29% en lo que va de año (270 millones menos) y no tienen visos de mejorar por la segunda ola.
Más gasto y más deuda. La receta del Gobierno de Pedro Sánchez para salir de la crisis generada por el coronavirus tiene su reflejo en las cuentas de las empresas ferroviarias, que, según los Presupuestos Generales del Estado (PGE), terminarán 2021 en números rojos y con un mayor pasivo al que hacer frente
Los Presupuestos "más ambiciosos" del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de los últimos 10 años concentran el grueso de su fuerza inversora en el ferrocarril y la vivienda, dos sectores que se van a repartir 8.126 millones de euros en 2021, el 58% de los 13.868 millones que el departamento de José Luis Ábalos prevé destinar a inversiones reales y que supone un alza del 53% respecto al año pasado. Un auténtico Plan Marshall con el que el Ejecutivo busca "contribuir a la salida de la crisis y la transformación medioambiental, social y productiva". "Al contrario que otras crisis, no nos vemos en la apremiante obligación de hacer recortes que afecten a la inversión. Esta vez podemos "impulsar la recuperación económica con los Presupuestos", ha asegurado el ministro en la presentación de las Cuentas.
La presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, ha dicho este jueves que la compañía tiene proyectos en cartera con cierto grado de madurez por un total de 14.000 millones de euros, por lo que es optimista sobre el acceso de estos desarrollos a los fondos del Plan de Recuperación y Resiliencia de la Unión Europea.
El Gobierno ha aprobado en el Consejo de Ministros de este martes la aprobación para iniciar los trámites para que la estación de Chamartín (Madrid) pase a llamarse Chamartín-Clara Campoamor. A propuesta de la vicepresidencia que lidera Carmen Calvo, el Ejecutivo defiende este cambio en el marco de la "divulgación de la Memoria Democrática, de la lucha por las libertades en nuestro país y que supone un homenaje a la impulsora del sufragio universal".
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha valorado positivamente la propuesta realizada por Adif para aumentar hasta el 50% la bonificación que afecta al importe que abona Renfe en concepto de cánones de adjudicación de capacidad en sus trenes y de utilización de líneas de larga distancia, ya que considera que cumplirá con su objetivo de incentivar el crecimiento del tráfico ferroviario de viajeros.
El Corte Inglés ha contratado a la consultora JLL con el fin de analizar la posibilidad de construir un edificio de oficinas en el solar que adquirió a finales de 2014 a Adif a través de una subasta pública, ubicado en el Paseo de la Castellana, en el área de Nuevos Ministerios y contiguo al centro que el grupo tiene en la zona.
La directora general de OUIGO España, Hélène Valenzuela, recibe a elEconomista en la planta de arriba de un Alstom Euroduplex TGV 2N2 aparcado en la estación de Atocha junto a un AVE de Renfe. El tren, que está pintado de blanco y salpicado con algunos círculos fucsia y azules, es el que va a utilizar el operador francés para competir en España a partir de 15 de marzo de 2021 con billetes de alta velocidad a mitad de precios. Un plan que mantiene pese a los rebrotes del covid-19, la reactivación de las restricciones, la baja demanda y a que Renfe opera a un 60% de su capacidad. "Hay que mirar al futuro, ser positivos y apostar por la movilidad porque la gente se va a tener que seguir moviendo, es fundamental para el PIB", asegura la directiva. SNCF vienen a España pero también darán la bienvenida a Renfe en Francia ya que, según defiende Valenzuela, la llegada de competencia ayuda a "mejorar el servicio, la calidad, los precios y la demanda". Algo muy importante cuando se apuesta por la sostenibilidad.
SNCF tiene previsto invertir 700 millones de euros para plantar a cara a Renfe en el mercado de la alta velocidad. El desembolso que el operador ferroviario contempla supera al planteado en su día por Acciona, que anunció que tenía previsto destinar 500 millones de euros a su aventura ferroviaria en España, y a las propuestas presentadas por otros candidatos como Globalvía (300 millones) o Talgo (400 millones para trenes), que habían solicitado menos capacidad. El gestor de infraestructuras y el fabricante se han quedado fuera del proceso mientras que Acciona finalmente no se presentó.