Uno de los giros inesperados en la resolución del caso Credit Suisse ha sido que los bonistas de deuda contingente convertible (CoCos o también llamados AT1 al ser capital adicional de nivel 1, los de más riesgo para el inversor) perderán todo su dinero sin que esto ocurra con los accionistas, que son quienes realmente cierran el orden de prelación en supuestos de impago. El mercado considera que las autoridades suizas han roto así las reglas del juego.
Banco Sabadell aplicará en 2023 una subida salarial mínima de 600 euros a todos sus empleados, sean o no beneficiarios de complementos salariales, según ha informado CCOO a través de un comunicado.
La banca europea tiene una exposición directa a Rusia, Ucrania y Bielorrusia limitada y "gestionable" a ojos de los supervisores. Pero al Banco Central Europeo (BCE) le preocupa el deterioro en los activos por los efectos de segunda ronda -derivados del freno en el PIB, alza de la inflación, etc.- y, de manera particular, ha puesto el punto de mira en las carteras "vinculadas a las materias primas y a la energía", por ser las que más probabilidades tienen de sufrir el shock geopolítico.
CaixaBank tiene 185 millones de euros con clientes de nacionalidad rusa. La inmensa mayoría (146 millones o el 78,92% del total) corresponde con hipotecas otorgadas a dichos ciudadanos para adquirir viviendas en España aunque mantienen nacionalidad rusa y residencia en el extranjero, según revela el banco en un informe financiero remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Acabamos de despedir un 2021 que no será recordado como un gran año. La difícil situación sanitaria, ocasionada por una pandemia que no acabamos de dejar atrás, ha tenido un efecto contractivo intenso y más prolongado de lo inicialmente esperado en la actividad económica a nivel global. Por si ello fuera insuficiente, en los compases finales del ejercicio se han unido un incremento, que hasta hace poco habríamos considerado inimaginable, de los precios de la energía y un afloramiento de la inflación, que se pensaba puntual y transitorio, pero que, como si quisiera imitar al virus, está mostrando una resistencia inesperada.
La banca española pierde posiciones en el ranking europeo de las entidades más solventes y, en un escenario de recesión, su ratio de capital caería por debajo del 10%, que es donde se fija el coste del capital y es la media también a la que caería la gran banca europea. Aun así, las cuatro entidades que han participado en los test de estrés que ha realizado la EBA (European Banking Authoriy) han superado la prueba y su consumo de capital en una hipotética recesión sería 182 puntos básicos inferior a la media comunitaria, que se sitúa en los 485 (frente a los 303 pb de los españoles). El mejor posicionado de todos ellos es Bankinter, y es, de hecho, el único que estaría en niveles del 11,25% (en esta ocasión sí ha sido evaluado por la máxima autoridad comunitaria del sector, en lugar de CaixaBank, quien quedó fuera de estos test ante su fusión con Bankia), mientras que Santander pasaría del bronce a la octava posición y BBVA de la quinta a la duodécima. Sabadell aguanta en la parte media de la tabla.
Después de 33 años ostentando las cuentas de la CNMV, BBVA se ha visto desplazado por Banco Santander, que ha sido la entidad elegida por la Comisión Nacional del Mercado de Valores para prestar los servicios bancarios del organismo supervisor por un importe estimado de 108.072 euros (sin IVA).
La Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglás en inglés) ha puesto de manifiesto una mayor debilidad de las entidades españolas que las del resto del Viejo Continente. En su informe sobre riesgos, tras el análisis del Ejercicio de Transparencia del sector, advierte de que en nuestro país los grupos financieros han reducido en la primera parte del año su rentabilidad casi el doble que en el conjunto de la Unión Europea, debido al aumento de las provisiones para afrontar impagos y al impacto de la crisis del coronavirus y la situación de tipos de interés negativos sobre los ingresos.
"Fusionarse por fusionarse no es necesariamente bueno". La advertencia procede del presidente de la Autoridad Bancaria Europea (EBA), José Manuel Campa, y la pronunció el miércoles pasado, dos días después de que se anunciara que BBVA y Sabadell habían emprendido formalmente conversaciones para crear una sola entidad.
Las autoridades supervisoras y reguladores europeas relajan esta semana con sus mensajes la euforia del mercado y los analistas por el anuncio de una vacuna eficaz contra el coronavirus y sus efectos positivos e inmediatos en la economía y la banca. Si ayer fue el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, el que auguraba una recuperación lenta, que se extenderá hasta 2023, hoy, el presidente de la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés), José Manuel Campa, pedía a las entidades más provisiones en este cuarto trimestre para evitar riesgos fuertes ante la retirada de los estímulos a las familias y empresas con la llegada de la vacuna. En la misma línea, esta mañana, el consejero delegado del Santander, José Antonio Álvarez, rebaja los efectos de la vacuna a corto plazo sobre la economía.
La banca española llega a la crisis provocada por el coronavirus con los menores niveles de capital de toda Europa. Según los últimos datos del ejercicio de transparencia realizados por la Autoridad Europea Bancaria (EBA, por sus siglas en inglés). En concreto, a cierre de 2019, el sector de nuestro país tenía un ratio de solvencia de máxima categoría del 11,9%, tres puntos por debajo de la media continental, y ligeramente por debajo de los reclamos realizados por los supervisores, que es del 12%.
La banca española tiene una exposición de hasta 217.422 millones de euros en los sectores más golpeados por la pandemia. Esta cifra supone que casi el 20% del crédito de las entidades del país está en los segmentos que más han sufrido las consecuencias del coronavirus y del parón de la actividad por el confinamiento. Concretamente, según la Autoridad Bancaria Europea (EBA), los sectores más golpeados son el manufacturero, energético, construcción, venta al por mayor y el por menor, transporte y almacenamiento, hospedaje y servicios de comidas, actividades administrativas y servicios de apoyo y finalmente, ocio, cines o teatros.
El plan de choque para la banca por la crisis sanitaria puesto en marcha por las autoridades bancarias europeas como relajar los requisitos de solvencia y eliminar el reparto de dividendos al menos hasta el próximo mes de octubre permitirán a las entidades europeas reforzar su capital (CET1) en más de 100.000 millones de euros, según señala la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés).
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha destacado que el sector financiero español está preparado para contribuir a la pronta recuperación de la economía tras el bache provocado por el coronavirus. Las entidades tendrán que canalizar los créditos a las empresas afectadas para evitar despidos y cierres masivos.
Los reguladores llevan tiempo instando a las entidades españolas a mejorar sus niveles de solvencia, ya que estos están situados a la cola del Viejo Continente. Los datos presentados este viernes por la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés) ponen de manifiesto tal realidad, pero Kutxabank es el único de grupo financiero de nuestro país que escapa de esta situación con parámetros de capital por encima de la media.
Nadia Calviño, ministra de Economía y Empresa, destacó en el acto que la economía española en la actualidad es más abierta pero no es indiferente a las circunstancias globales. No obstante, Calviño dijo que en los foros internacionales hay preocupación por la economía a nivel global, "pero gran confianza en la española". La ministra aseveró que todos los organismos prevén que el crecimiento económico de España esté por encima de la media del resto de países de la Unión Europea este año y el próximo. "Nuestro crecimiento económico se asienta hoy sobre un patrón más estable, se han recuperado prácticamente los niveles de empleo previos a la crisis y sin llegar a una burbuja en la construcción", señaló.
El presidente de Editorial Ecoprensa, Antonio Rodríguez Arce, destacó este martes la "excelsa trayectoria profesional" del presidente de la Autoridad Europea Bancaria (EBA, por sus siglas en inglés), José Manuel Campa, durante el acto de entrega del II Edición de los Premios José Echegaray de elEconomista.
El presidente de la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés), José Manuel Campa, ha sido galardonado hoy en la II Edición de los Premios José Echegaray de Editorial Ecoprensa por su contribución a los ideales liberales y por su excelsa trayectoria profesional, a nivel nacional e internacional, tanto en el ámbito público como privado. José Manuel Campa, en el acto, señaló que las autoridades reguladoras y supervisoras, a pesar de la robustez que el sector financiero muestra en los ejercicios de estrés, ven "señales preocupantes" en la banca europea como la baja rentabilidad y recordó que la mayoría de entidades llevan años por debajo de su coste estimado de capital.
ElEconomista entregará en el día de hoy, a partir de las 19.00 horas, el Premio José Echegaray a José Manuel Campa, presidente de la Autoridad Europea Bancaria (EBA, por sus siglas en inglés). En esta segunda edición del galardón, el periódico ha querido distinguir la figura del mandatario español, que lleva al frente de esta institución comunitaria desde el pasado 1 de mayo, y su peso en organizaciones internacionales.