La falta de claridad sobre el próximo Gobierno alemán obliga a la Unión Europea (UE) a congelar sus decisiones sobre política económica. Pese a que el candidato socialdemócrata, Olaf Scholz, es el favorito para conseguir la Cancillería, los liberales, liderados por Christian Lindner, son clave para formar Gobierno. Lindner puede determinar el futuro de la política económica europea. Su partido exige "terminar con la orgía de deuda" y la contención ya de las políticas expansivas en la UE por la crisis del coronavirus. Además, la paralización incluye otras políticas urgentes, como la exterior y la defensa.
El Partido Socialdemócrata alemán (SPD) ha ganado las elecciones federales celebradas este domingo en Alemania, ligeramente por delante de la coalición de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) y la Unión Social Cristiana (CSU). Sin embargo no podrá gobernar en solitario y se abre un proceso de negociación de pactos para poder gobernar.
La candidata verde a la Cancillería, Annalena Baerbock, irrumpió en la campaña alemana prometiendo juventud y feminismo, ímpetu, cambio y "realismo radical", pero su inexperiencia, sus traspiés y un supuesto plagio le han pasado factura.
El ministro de Finanzas alemán, Olaf Scholz, ha sido la apuesta de su formación política, el Partido Socialdemócrata (SPD) para alcanzar la Cancillería tras ocho años como socio minoritario de la coalición presidida por Angela Merkel.
El candidato del bloque conservador a la Cancillería, Armin Laschet, pugna por el poder desde su posición de sucesor natural de Angela Merkel, aunque lastrado por los sondeos y por su condición de 'opción B' a tomar el relevo de la canciller.
En la Unión Europea nada se mueve, no ya sin el impulso, sino sin el consentimiento de Alemania. Con el Pacto de Estabilidad y Crecimiento en cuestión, el fondo de recuperación apenas empezando a distribuirse, y la integración económica y monetaria en pausa, la Unión se juega el futuro de su gobernanza en las elecciones generales de este domingo.
El pueblo alemán afronta las primeras elecciones sin la longeva canciller, Angela Merkel, tras 16 años. Unos comicios trascendentales tanto para la propia Alemania, como para Europa. Bajo el liderazgo de Merkel, los germanos han logrado afianzarse como locomotora económica del continente, así como el país con más peso en la política de la UE. En un país con tradición de coalición entre partidos, esta legislatura no va a ser diferente.
Según el analista Martin Wolf, para superar los problemas actuales hay que coordinar la regulación en áreas como las finanzas y la tecnología, defender la libertad de expresión, preservar la paz frente a las amenazas globales y seguir abiertos al comercio y a las ideas plurales.
La prioridad del nuevo líder cristianodemócrata alemán, Armin Laschet, es mantener unidos a su partido y al país. Posicionar a la CDU de manera inteligente en términos de contenido y estrategia para las elecciones federales de septiembre. Con confianza y fiabilidad el político centrista pretende continuar el rumbo y el estilo político de Angela Merkel.
El ministro presidente (o primer ministro) del estado alemán de Renania del Norte-Westfalia, Armin Laschet, ha ganado la elección al liderazgo de la Unión Cristiano Demócrata (CDU), el partido de la canciller alemana, Angela Merkel, en el primer paso para decidir al candidato que intentará suceder a la mandataria al frente de la Cancillería en las elecciones nacionales de este año.
La Unión Demócrata Cristiana de Alemania (CDU) elige este sábado a su nuevo presidente, una votación clave en vistas a la sucesión de la canciller Angela Merkel, cuyo mandato culminará, después de 18 años en el Gobierno, tras las elecciones legislativas previstas para el próximo mes de septiembre. Por circunstancias especiales, y dada la situación de pandemia, la elección del sucesor de la líder alemana se celebrará por primera vez de manera online y tendrá dos vueltas.
La carrera para liderar a Alemania ha quedado abierta de par en par este lunes, después de que Annegret Kramp-Karrenbauer anunciara su dimisión como líder de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Angela Merkel, renunciando también a presentarse como candidata a canciller del partido que más tiempo ha gobernado el país en las próximas elecciones.
La carrera para liderar a Alemania ha quedado abierta de par en par este lunes, después de que Annegret Kramp-Karrenbauer anunciara su dimisión como líder de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Angela Merkel, renunciando también a presentarse como candidata a canciller del partido que más tiempo ha gobernado el país en las próximas elecciones.