Un artista no solo se define por sus increíbles habilidades para pintar al óleo un paisaje o por hacer un retrato tan detallado que no sabrías decir si se trata de un dibujo o una fotografía, sino por tener ideas creativas que sean capaces de llamar la atención del espectador. Hay arte por todo nuestro alrededor, y los artistas saben cómo encontrarlo. Un claro ejemplo de esto es Cal, un artista callejero que coloca sus obras en lugares que interactúan a la perfección con su entorno.
Ser famoso por mantener en secreto una de las grandes incógnitas de la sociedad del siglo XXI ha terminado costándole caro a Banksy. El artista callejero ha perdido los derechos de autor de una de sus obras más representativas (Lanzador de flores), ya que la Unión Europea ha fallado a favor de una empresa de postales británica.
Ser famoso por mantener en secreto una de las grandes incógnitas de la sociedad del siglo XXI ha terminado costándole caro a Banksy. El artista callejero ha perdido los derechos de autor de una de sus obras más representativas (Lanzador de flores), ya que la Unión Europea ha fallado a favor de una empresa de postales británica.
El arte está en la calle. Por todas partes. Los espacios urbanos se han convertido en lienzo, estudio, escaparate, desde hace décadas. Y ha terminado calando en la mirada actual sobre el arte de una forma inconsciente, intuitiva y poderosa. El street art, arte urbano o nuevo arte contemporáneo, es una referencia, con un potente efecto de convocatoria incluso para los no habituales de los circuitos tradicionales del mercado del arte. Su salto de los muros y fachadas al trabajo de estudio, a las galerías, a las subastas y a los museos, lo ha consagrado como la representación más genuina del arte actual.