Mambo (Motor Additive Manufacturing Boat), de la joven compañía italiana Moi Composites Srl, muestra un barco nuevo y de forma única que no se puede conseguir con la fabricación tradicional. Fue elaborado digitalmente en tecnología de impresión 3D patentada, Continuous Fiber Manufacturing (CFM), un sistema innovador que, gracias al uso de robots guiados por expertos por algoritmos generativos, permite la impresión 3D de materiales compuestos de fibra continua, un material termoestable que hace que los productos sean fuertes, ultraduraderos y livianos
Mambo (Motor Additive Manufacturing Boat), de la joven compañía italiana Moi Composites Srl, muestra un barco nuevo y de forma única que no se puede conseguir con la fabricación tradicional. Fue elaborado digitalmente en tecnología de impresión 3D patentada, Continuous Fiber Manufacturing (CFM), un sistema innovador que, gracias al uso de robots guiados por expertos por algoritmos generativos, permite la impresión 3D de materiales compuestos de fibra continua, un material termoestable que hace que los productos sean fuertes, ultraduraderos y livianos
El Consorcio de la Zona Franca de Barcelona exportará el modelo de gestión del hub tecnológico DFactory al parque empresarial de la Zona Franca de Bogotá (Colombia), que ha requerido de su asesoramiento después de conocer de primera mano el impulso de la industria 4.0 en Barcelona.
Corporación Mondragon, a través del grupo guipuzcoano Danobat, ha entrado en el segmento de la impresión 3D participando en la ronda de financiación lanzada por la startup catalana BCN3D.
Aciturri Additive Manufacturing, división de Aciturri especializada en el desarrollo y fabricación de componentes aeronáuticos empleando tecnologías de fabricación aditiva, ha instalado en el estabilizador vertical (VTP) del Airbus A350 las primeras piezas de vuelo fabricadas en España utilizando tecnología aditiva (impresión 3D).
Cuando se habla de los avances que marcarán la ciencia y la atención sanitaria en los próximos años, no hay duda de que todas las miradas dentro del sector médico se dirigen hacia la medicina personalizada y de precisión (MPP).
Las compañías del sector han puestos sus activos, principalmente industriales, logísticos y tecnológicos, al servicio de la comunidad para paliar el impacto sanitario y social del Covid-19.
20/04 | El Economista America
elEconomistaAmerica Chile
Ante la necesidad de suplir la falta de equipamiento y así evitar el aumento de infectados por coronavirus entre el personal de salud a nivel nacional, el FabLab del Centro de Innovación UC diseñó un protector facial de rápida impresión 3D, adaptado de un modelo de la plataforma internacional Coronavirusmakers.
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ha autorizado el respirador de campaña ideado por la alianza entre el Consorcio de la Zona Franca (CZFB), HP y Leitat (Tecnio), junto al CatSalut, a través del Consorcio Sanitario de Terrassa y el Hospital Parc Taulí de Sabadell.
Toda la población en alguna medida puede ayudar a la lucha contra el coronavirus. La mayoría lo que debe hacer es quedarse en casa para respetar el confinamiento. Sin embargo, hay quien puede hacer más. Ahí están los grandes filántropos que donan recursos a la lucha, pero también hay pequeños contribuyentes que pueden ayudar. Por ejemplo, los que tienen una impresora 3D en casa pueden unirse a CoronavirusMakers, una red de 13.000 personas que fabrican material sanitario.
Las personas que se quedan todo el día en su casa practican una suerte de heroicidad. De su férrea voluntad de cerrar la puerta a los riesgos y no agravar el problema depende la victoria en esta extraña batalla. Mientras que muchas ciudades británicas mantienen la distancia social de dos metros, España sigue al dedillo la receta aplicada en China. Y precisamente en Wuhan, donde empezó la epidemia, ya no hay infectados y sus ciudadanos vuelven a pisar la calle tras concluir un confinamiento que empezó el pasado 23 de enero, hace justo dos meses.