Es casi imposible pensar en comernos una hamburguesa sin añadir un chorreón de kétchup. O un perrito caliente. O patatas fritas. Casi con seguridad, podemos decir que se trata de la salsa más popular del mundo. Hay gente que lo usa para condimentar cualquier comida, por raro que pueda parecer.
Ni plástico reciclado ni vidrio, el futuro para la icónica botella de kétchup Heinz pasa por el papel. La histórica marca de salsas acaba de anunciar su colaboración con Pulpex, empresa especializada en el envasado con papel, para desarrollar una botella de papel renovable y reciclable, fabricada al 100% con pulpa de madera de origen sostenible.
Uno de los caprichos que nos podemos dar después de una semana intensa de trabajo (y de cumplir a rajatabla con la dieta) es comernos una buena hamburguesa. Carne de vacuno o de pollo, queso, lechuga, bacon, tomate, cebolla, huevo, un toque de trufa... Las posibilidades para confeccionar nuestra burguer son infinitas.
Heinz acaba de presentar su Ketchup 'Marz Edition', una variante de su tradicional salsa elaborada con tomates cultivados bajo condiciones similares a las de Marte. Una edición donde la tecnología, la gastronomía y la investigación van estrechamente de la mano.