La división de servicios aeroportuarios de Acciona se ha adjudicado el contrato de prestación de servicios de rampa del Grupo Lufthansa en el aeropuerto de Düsseldorf en Alemania, según ha comunicado la empresa este jueves.
Volotea suma un nuevo país a su mapa de destinos. La aerolínea de vuelos regionales ha llegado a un acuerdo con Eurowings, la filial de bajo coste de Lufthansa, para operar hasta 140 rutas en código compartido para este 2023. La firma dirigida por Carlos Muñoz operará ocho conexiones desde Italia y Francia hasta las ciudades de Berlín, Stuttgart, Hamburgo y Dusseldorf. Aunque no abrirá ninguna base en territorio germano, se trata de la primera piedra de la expansión en el país.
El tráfico aéreo del 2022 no ha conseguido recuperar los niveles previos a la pandemia por la evolución de los precios del combustible y las restrictivas políticas de los bancos centrales. Ahora, es en el 2023 donde se calcula que las aerolíneas recuperarán la normalidad de su negocio.
Las compañías aéreas han estado en el centro de todas las miradas en las últimas semanas ante los anuncios de las diferentes huelgas de tripulantes de cabina que han convocado los sindicatos. Un handicap al que tienen que hacer frente que se suma a otros de mayor calado, como los altos costes derivados del alza del precio de los combustibles, la escasez de personal y la guerra en Ucrania.
El sector del turismo europeo tuvo un buen despegue ayer en bolsa y consiguió colocarse a lo largo de la jornada como uno de los más alcistas la jornada, con un rebote del 0,9% del Travel&Leisure, el índice que aglutina las compañías de esta industria del Viejo Continente.
Ucrania está ya a escasas horas de que se cumplan dos meses de la invasión rusa. Casi 60 días de pólvora, escombros y arduo combate ha soportado ya un país sobre el que siguen puestas todas las miradas, incluidas las de analistas e inversores, que empiezan ya a otorgar un menor peso al escenario bélico en el devenir de los mercados.
Las previsiones para las tres grandes aerolíneas europeas se han enfriado significativamente en los últimos cuatro meses a la espera de que, por segundo año consecutivo, publiquen pérdidas históricas a finales del próximo mes y principios de marzo. IAG y Deutsche Lufhtansa se encuentran ya a un paso de marcar 2022 como el tercer ejercicio consecutivo en números rojos si los analistas continúan empeorando sus estimaciones.
Lufthansa y MSCquieren hacerse con la mayor parte del capital de ITA, la nueva Alitalia. El pasado lunes, ambas compañías enviaron una manifestación de interés y solicitaron un periodo de exclusividad de 90 días para trabajar en la operación. Si finalmente saliese adelante y se produjese el proceso de consolidación, Lufthansa conseguiría entrar en el top 3 de aerolíneas mundiales tomando como referencia los ingresos de 2019, último año completo antes de la irrupción del Covid-19.
Las dudas ante una lenta salida de la pandemia se dinamitaron a finales de noviembre cuando Sudáfrica comunicó la existencia de una nueva variante del virus, ómicron. Por entonces, la corrección de los mercados ya se había llevado por delante la expectativa de las aerolíneas de cerrar el año en positivo, pero ahora la oleada de cancelaciones ante una tasa de contagios disparada ha puesto el foco sobre el sector. Y ahí han acudido los cortos. Las posiciones bajistas entre las aerolíneas europeas se incrementaron en la semana previa a Navidad, llegando a alcanzar el 6,26% en Air France-KLM y también estaban por encima del 6% en IAG, hasta hace justo un día. Citadel Advisor, un histórico bajista del mercado, ha decidido dar un paso atrás y reducir su posición, y ahora seis bajistas controlan el 4,13% del capital del holding -Bloomberg, no obstante, tan solo recoge las posiciones superiores al 0,5% del capital, con lo que el peso de los cortos podría ser superior-. Es la segunda aerolínea con un mayor porcentaje de cortos sobre su capital. En el caso de Deutsche Lufthansa, la tercera mayor aerolínea del continente, esta posición es del 1,21%.
La subida del precio de petróleo empieza a ser algo más que un quebradero de cabeza para las aerolíneas europeas. Al menos, así lo entienden las firmas de inversión que cubren su evolución, que en los últimos meses han reducido de manera drástica sus estimaciones de beneficio para 2022 y 2023 a pesar de que mantienen casi intactas sus previsiones de ventas.
El grupo Lufthansa ha devuelto al Estado alemán 1.500 millones de euros de las ayudas que le concedieron al comienzo de la crisis económica originada por el Covid-19 y tiene previsto devolver otros 1.000 millones antes de que finalice el año y de esta manera prescindir de las ayudas que no ha utilizado. La aerolínea ha podido devolver el dinero tras realizar una ampliación de capital en la que ha obtenido 2.162 millones de euros.
El sector del turismo y la aviación está siendo uno de los más perjudicados por la crisis del coronavirus. La menor movilidad está provocando que muchos vuelos salgan sin tener todas las plazas vendidas. Así, la aerolínea Lufthansa, buscando ofrecer soluciones innovadoras para aumentar su comodidad, pondrá a prueba su producto más nuevo, el 'Sleeper's Row'. Se trata de una especie de cama para la clase turista que estar a disposición de los pasajeros en la ruta Frankfurt-São Paulo.
Otros 6.000 millones para Air France-KLM. Un paquete de rescate para el mayor prestamista italiano Monte Dei Paschi. Ronda tras ronda de dinero del gobierno en dirección a las empresas alemanas que van desde ThyssenKrupp a TUI y Lufthansa, y un fondo de 10.000 millones para ayudar a las empresas españolas. En toda Europa, los gobiernos están aumentando las ayudas estatales tanto para apoyar a las empresas en problemas como para construir nuevas industrias.
Un mes después de haber cerrado con éxito la ampliación de capital de 2.741 millones de euros, las grandes posiciones bajistas se han dispersado en IAG a diferencia del resto de grandes aerolíneas europeas, como Air France-KLM y Deutsche Lufthansa. Según Bloomberg, que recoge las posiciones cortas superiores al 0,5% del capital de las compañías, quienes apuestan porque el holding hispano-británico caiga en bolsa han pasado de controlar un 7,5% del capital hace un mes al 0,5% actual, propiedad de DE Shaw&Co., firma de capital neoyorquina que basa sus inversiones en algoritmos matemáticos y que afloró su posición el 30 de octubre.
Lufthansa clama al sector para evitar una guerra de precios en pleno desplome de los ingresos y auge de las pérdidas. El consejero delegado de la aerolínea, Carsten Spohr, que ya ha asegurado que tendrán un ebit negativo en el segundo semestre pese a la reactivación, ha pedido a la industria que deje de luchar "por crecer a cualquier precio".
El cierre de las fronteras entre EEUU y la Unión Europea amenaza el futuro de las aerolíneas de largo radio de ambos lados del Atlántico y de la recuperación de la economía. Aunque el Consejo Europeo se ha comprometido a revisar y actualizar cada quince días la lista de terceros países habilitados para volar a la UE, lo cierto es que no parece que se vayan a retomar las conexiones con el país norteamericano en el corto plazo debido a su complicada situación epidemiológica.
En Chile ya se habla de desconfinamiento. Los contagios han caído un 36% en los últimos 14 días; las exportaciones crecieron un 2,3% en junio; en M&A (fusiones y adquisiciones) hubo retrocesos; Latam Airlines, la principal aerolínea latinoamericana, ha conseguido los 2.000 millones de dólares que necesitaba en el área privada.
A tenor de los datos de la OACI y la IATA, la salida del túnel en el sector aéreo no parece que se empiece a ver hasta inicios de 2021. A estas alturas la mayoría de los operadores asumen esta nueva normalidad con cuatro incógnitas principales: qué restricciones operativas y de ocupación de las aeronaves existirán y hasta cuándo; la extensión temporal de la pandemia, sus rebrotes y la llegada de una cura; la capacidad económica de los pasajeros para volver a volar y el temor de la población a contagiarse viajando en avión o a ciertos destinos.
Deutsche Lufthansa ya respira tranquila. Tras varias semanas de intensas negociaciones y dudas, la compañía aérea más grande de Europa ha logrado blindar el rescate gubernamental de 9.000 millones de euros al obtener el visto bueno de los accionistas y de la Unión Europea (UE). Así, la aerolínea aleja el fantasma de la insolvencia y se garantiza la liquidez suficiente para afrontar la lenta recuperación del tráfico de pasajeros, reestructurarse y devolver los más de 2.500 millones de euros que debe en billetes cancelados. Tras varios días a la baja, las acciones de la cotizada cerraron ayer jueves con un alza del 7% gracias a que su futuro se ha despejado.
La junta general extraordinaria de accionistas de Lufthansa ha aprobado este jueves el plan de rescate de 9,000 millones de euros del Gobierno alemán para que la compañía haga frente a la crisis del coronavirus.
Las bolsas de Europa logran alzas que rondan el punto porcentual al cierre de este jueves, después de haber cotizado a lo largo del día 'bajo presión' y clara debilidad. Recuperan parte de las fuertes ventas sufridas ayer. Pero si se atiende al análisis técnico, los índices siguen manteniendo "muy alto" el riesgo de ver próximamente una corrección en profundidad, según Ecotrader. Este jueves el Ibex 35 español ha ascendido un 1,04%, hasta los 7.270 puntos. Wall Street también intenta los ascensos al otro lado del Atlántico, pero con muchas dificultades. Hoy ha centrado la atención el dato final del producto interior bruto (PIB) de Estados Unidos en el primer trimestre y el paro semanal en el país.
La cúpula de Lufthansa trabaja contra reloj para evitar la quiebra si finalmente el plan de rescate pactado con el gobierno alemán es rechazado mañana (25 de junio)por sus accionistas en la Junta Extraordinaria online. La mayor aerolínea de Europa ha elaborado un plan B para dar entrada a Alemania en su capital y conseguir los 9.000 millones vitales para su supervivencia en el corto y medio plazo sorteando la oposición de su principal inversor, Heinz-Hermann Thiele, que, con el 15,5% del capital, se resiste a diluirse.
Las acciones del grupo de aerolíneas Lufthansa, el mayor de Europa, han sufrido este lunes pérdidas de hasta el 8,8% en la bolsa de Frankfurt, aunque al cierre las ha mitigado hasta el 3,11%. Su principal accionista, el empresario germano Heinz Hermann Thiele, está poniendo objeciones al rescate del Gobierno de Alemania valorado en 9.000 millones de euros. La compañía se juega su solvencia: no podrá sacar adelante el plan si el jueves no logra el jueves el apoyo de dos tercios de los accionistas.
El miedo a una segunda oleada en la pandemia del coronavirus sigue condicionando el comportamiento de las bolsas. Las europeas se han visto presionadas por las ventas desde primera hora. En España el Ibex 35 deja otra vez atrás los 7.400 puntos tras caer un 0,92% hasta los 7.345 enteros. Esto ha sucedido en el día en que Almirall ha pasado a formar parte del 'club' (en sustitución de Mediaset España) con un debut positivo. En líneas generales, los índices se han distanciado de sus resistencias. Y la tibieza marcada en Wall Street no ha servido de respaldo.
Lufthansa podría vender su filial belga Brussels Airlines o dejar que quiebre, informó el viernes el diario La Libre, citando fuentes anónimas de la aerolínea.