Desde que se eliminó la tilde del adverbio 'solo' en el año 2010, el mundo hispanohablante se dividió (en términos ortográficos) en dos: los satisfechos, quienes celebraron la resolución motivados por una simplificación de la norma; y los descontentos, quienes no han cesado de pedir el regreso a la antigua norma.
El ataque de lo políticamente correcto lo es sobre todos los azimuts sociales y, personalmente, el que a mí más me desasosiega es el que va contra nuestra lengua y que pretende imponer un llamado lenguaje inclusivo.
Con el 2021 al borde de su cierre de puertas, la FundéuRAE ha querido hacer uno de sus rituales más reconocidos. En una clasificación con 12 vocablos, el próximo 29 de diciembre dará a conocer la que es la palabra del año tras 365 días marcados por el auge del dinero virtual, el precio de la luz y, como en 2020, la pandemia por el coronavirus.
Aunque ya sabemos que en el mundo existen más 7.000 idiomas diferentes, el español es uno de los más conocidos y utilizados. Más de 400 millones de personas son capaces de hablar este idioma, situándose con eso en el segundo lugar del ranking, solo por debajo del chino. Esto se debe en gran parte, a la gran cantidad de países que tienen el español como idioma oficial y el crecimiento de las industrias de estos países en el mercado internacional.
Superada la cuarentena, la cincuentena y la sesentena, ya vamos camino de la setentena. Ese ejercicio de contar días recuerda que el permiso limitado para practicar deporte individual por las calles -concedido hace justo dos semanas-, no ha elevado el censo de contagios, al menos por ahora. El tasa de crecimiento del COVID-16 en España durante el pasado jueves fue de 0,22%, la segunda más reducida de Europa, solo superado por Suiza (0,11%). En paralelo, la Incidencia Acumulada (IA) del coronavirus en nuestro país (24,52), ya se sitúa por debajo de la mitad del umbral epidemiológico de la gripe común (52,6 casos por cada 100.000 habitantes). Sólo cuatro países europeos han registrado una IA inferior a la española en los últimos 14 días: Suiza (11,74), Polonia (12,76), Alemania (16,51) y Francia (18,35). Al margen de los eventuales picos de sierra que pueden repetirse de una jornada para otra, cada vez se producen menos hospitalizaciones por COVID-19. Y también se reduce la cifra de personas que ingresan en las UCIs por esta enfermedad. El pasado jueves fueron 29 -casi la mitad de ellas en Cataluña-, con 13 comunidades sin nuevos enfermos graves.
Cada vez que alguien pronuncia o escribe la palabra desescalada, algún académico de la RAE se retuerce en su butaca. Pese a ello, los cuidadores del idioma no han tenido más remedio que aceptar a regañadientes un anglicismo del que nos acordaremos cada hora del día durante los próximos dos meses. En el mejor de los casos, y si nada se tuerce por el camino, a finales de junio concluirá la fase de la reducción de las medidas de emergencia derivadas de la crisis de la COVID-19, también conocido como desescalada (con perdón). Si seguimos portándonos bien, y si la evolución del virus mantiene la actual tendencia, nada impediría disfrutar de las playas este verano, con medidas de espacio personal. Por lo tanto, que desfile rápido esta primavera y llegue enseguida la canícula. Hasta el doctor Fernando Simón, responsable de la Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, concede cierta credibilidad a los que defienden las bondades del calor para frenar los contagios.
El español es un idioma de lo más variado. Con tantos hispanohablantes y países que cuentan con el español como lengua oficial, es normal que la manera de hablarlo varíe enormemente dependiendo del lugar en el que nos encontremos.
La Real Academia Española (RAE) se opone a adaptar el lenguaje de la Constitución Española para hacerla más inclusiva al considerar que el texto ya "gramaticalmente impecable", aunque sí ven "correcto" en la institución desdoblar algunas palabras, como príncipe y princesa.
Nuestra manera de comunicarnos, si la comparamos con la de 100 años atrás, es totalmente diferente. Si antes recibir cartas de familiares era algo de lo más común, ahora podemos hablar con ellos con un simple mensaje. Esto hecho también ha producido que nuestro propio vocabulario cambie y que usemos nuevas palabras, sin embargo, hay cosas y situaciones a las que el tiempo no les afecta y aunque sigamos viviendo con ellas no sabríamos cómo definirlas.
El castellano, aunque es un idioma oficial, puede sonar de diferente manera según la zona en la que uno se encuentre. Por ejemplo, si en una zona un niño pequeño come patatas, en otra un niño chico come papas. Estas pequeñas diferencias a la hora de hablar aunque son diferentes, son totalmente correctas y existen una institución encargada de verificarlo: la Real Academia Española.
Las redes sociales llevan días celebrando el fin e inicio de una década; sin embargo, la Real Academia Española ha aclarado que la 2020 no marca el inicio de una nueva década.
¿Cuál sería el libro más aburrido de leer? Aunque todo depende de los gustos de cada lector, no cabe duda de que muchos coincidirán en que el diccionario, independientemente del idioma, podría ser uno de ellos. Si alguna vez se te ha pasado por la cabeza leer uno de ellos, pero desechado la idea a los pocos segundos, existen varias personas que han completado su lectura.
2019 cierra sus puertas y también en el ámbito verbal, donde como cada año la Fundeu ha sacado sus candidatas a ser Palabra del Año. Doce vocablos que tienen la condición de haber sido "términos que hayan estado, en mayor o menor medida, presentes en el debate social y en los medios de comunicación" y que optan a suceder a 'microplástico', la ganadora de 2018. Entre ellas destacan, 'exhumación', 'emoji', 'influente' o 'electromovilidad'.
Desde este jueves, a usted le podrán mensajear un zasca por hablar sobre los antitaurinos. Estas palabras son tres de las 88 acepciones que la Real Academia Española (RAE) ha introducido este jueves en el Diccionario de la Lengua Española (DLA), además de otras modificaciones que suman un total de 1.100 en su 23º edición.
Madrid, 24 sep (EFE).- Carlos García Gual, escritor, helenista, crítico, traductor y académico de la RAE, ha sido galardonado con el Premio José Luis Sampedro del Festival Getafe Negro.
Ya veo que hay un número de recursos tecnológicos interesantes para favorecer el aprendizaje de los alumnos. Personalmente soy fan de las herramientas de trabajo colaborativo como el Office Share Point, Trello y otros. Pero me ocurre que no encuentro pedagogías realmente innovadoras basadas en nuevas tecnologías y no solo sean hacer más eficientemente lo mismo que se ha hecho toda la vida. Y en las publicaciones científicas, aparte de las bondades de distintas herramientas para favorecer el engagement (no es poco) por el momento, tampoco encuentro respuestas.
Roma, la película de Alfonso Cuarón llamada a copar la temporada de premios -recogió hace una semana dos globos de oro, como mejor película extranjera y mejor dirección- irrumpió en su estreno en diciembre con la controversia de ser la primera película de un peso pesado de Hollywood estrenada en Netflix -la plataforma está tras su producción-.
Santiago de Chile, 8 ene (EFE).- La ensayista Adriana Valdés asumió hoy la dirección de la Academia Chilena de Lengua, convirtiéndose en la primera mujer en tomar el liderazgo de esta institución en sus 133 años de historia, aunque aseguró que este nombramiento "no es por ser mujer, sino por ser académica".
Madrid, 8 ene (EFE).- El jefe de los Mossos d'Esquadra, Miquel Esquius, ha asistido hoy al acto de entrega de los despachos a la nueva promoción de jueces, celebrada en Madrid con la presencia de Felipe VI, de la cúpula judicial y miembros del Gobierno.
La Real Academia Española (RAE) ha modificado la definición de 'periodista' y 'periodismo' en la última edición del diccionario digital, tres años después de que el periodista Ramón Salaverría enviara una petición formal a la institución en la que consideraba "improcedente" mantener la definición "obsoleta".
Madrid, 8 ene (EFE).- El jefe de los Mossos d'Esquadra, Miquel Esquius, ha asistido hoy al acto de entrega de los despachos a la nueva promoción de jueces, celebrada en Madrid con la presencia de Felipe VI, de la cúpula judicial y miembros del Gobierno.
Tras ser seleccionado como nuevo director de la institución, el jurista encara el cargo enfrentándose a retos como la complicada situación financiera que atraviesa la Academia o el debate del lenguaje inclusivo. Sin embargo, confía en que tanto las labores del Ejecutivo como sus próximos proyectos serán realmente favorables para el futuro de la RAE.