Cortar pan es una de las acciones que solemos llevar a cabo a lo largo del día, generalmente a la hora de comer. Si bien coger el cuchillo y cortar las rebanadas de arriba hacia abajo suele ser lo habitual, sentimos decirte que lo estás haciendo francamente mal de cara a no llenar la mesa de migas.
Y es que las migas son uno de los elementos más molestos a la hora de partir el pan. Acaban en el suelo, repartidas por toda la mesa, en el propio plato y en definitiva un completo desastre. Pero, ¿cómo es posible que una tarea, a priori tan sencilla, se convierta en un caos y fruto de discusiones en determinados casos?
Por suerte estás de enhorabuena, pues en EcoDiario tenemos el método definitivo para que puedas cortar el pan como mandan los cánones, y lo que es mejor, sin migas. Por supuesto necesitarás el objeto estrella para la tarea, el cuchillo. Este es importante que sea de sierra, pues es el que nos asegura un corte limpio y estable.
Una vez todos los ingredientes sobre la mesa, llega el momento de entrar en acción. Olvídate por completo de cortar como hasta ahora, es decir, de arriba a abajo. Debes de hacerlo al contrario: desde abajo y hacia arriba. Además de no conseguir ni la mitad de migas que antes, te asegurarás de que el corte sea mucho más suave, deslizando mejor el cuchillo. Dicho esto, es el momento no sólo de que lo pongas en práctica sino que presumas de truco delante de tu familia y amigos la próxima vez que los invites a comer.
