El momento previo a una entrevista de trabajo siempre suele traducirse en nervios y cuidar todos y cada uno de los detalles. Desde el pelo, pasando por el calzado pero también por supuesto la vestimenta. Si eres de los que piensa que a pesar de que saques tus mejores galas el color o combinación puede no importar, tal vez te interese saber que estás francamente equivocado.
En una entrevista de trabajo hay pequeños detalles que debemos de cuidar. Líneas atrás hemos mencionado algunos, como por ejemplo el pelo. Un CV cuidado, así como una actitud no verbal o lenguaje corporal correcta son otros elementos que no debes dejar pasar por alto. No obstante el color de la ropa puede desvelar mucha información sobre ti, o en el peor de los casos, disuadir a la persona que te entrevista.

Mientras que el azul o el negro son dos de los colores más recomendados para acudir a una entrevista de trabajo, el naranja es la última opción que deberás de tener en cuenta. Según un estudio realizado en 2013 por CareerBuilder, este color está asociado a una falta de profesionalidad, además de ser el peor recomendado para este tipo de eventos.
Un total de 2099 encuestados entre los que figuraban representantes de recursos humanos y contratación escogieron el naranja, con un 25 por ciento de los votos, como el color que deberíamos de desechar a la hora de acudir a una entrevista de trabajo. Otros detalles que también figuraban en el estudio reflejaban que no había que acudir demasiado informal a las entrevistas, así como cuidar aspectos que a priori pudieran pasar desapercibidos a simple vista. Desde el cinturón, los calcetines o las pequeñas joyas que nos acompañen.