Si en algo coinciden la mayoría de las personas en el mundo es que no les agrada para nada los insectos. Obviamente hay personas a las que les encantan e incluso son capaces de tener alguno de ellos en su propia casa, sin embargo esto es algo que no ocurre en la mayoría de casos.
Que a la gran parte de la sociedad no les gusten los insectos o incluso sientan miedo por ellos no es una mera casualidad. Cada cultura es diferente y cada persona tiene una personalidad propia por lo que si tantas personas coinciden en algo debe haber una razón lógica detrás que lo demuestre.
¿Por qué tememos a los insectos?
Aunque no hay un verdadero motivo por el cual nos dan miedo los insectos, existen varias teorías que dan respuesta a esta incógnita. Algunos insectos provocan enfermedades e incluso la muerte por lo que desde hace muchos años se han vinculado con algo peligroso por parte de la sociedad. Esto generó que las personas evitaran entrar en contacto con los insectos sean peligrosos o no, para así asegurar su integridad física.
Si bien gracias a los sistemas de higiene y los productos contra insectos que existen en la actualidad el riesgo de encontrarse un insecto peligroso es menor, la sensación de peligro se fue heredando de padres a hijos desde hace años lo que generó miedo y en algunos casos fobia en gran parte de la sociedad. Esto no quiere decir que los adultos enseñen a los niños a tener miedo a los insectos, sino que los niños ven a los adultos asustados y aprenden de su comportamiento.
Otro punto a tener en cuenta relacionado con el miedo a los insectos, es que en muchas series y películas se estigmatizan como si fueran seres peligrosos y temibles. Esto es lo mismo que ocurre con la coulrofobia o fobia a los payasos, la cual está generada en gran medida por las películas de terror.