
No siempre, pero en algunas ocasiones los despistes pueden dejarnos con una imagen que no podría haber sido posible si se hubiese premeditado. La casualidad y la aleatoriedad a veces son lo mejor que le puede pasar a una instantánea, y muestra de ello es una fotografía olvidada dentro de una lata de cerveza.
La imagen en cuestión pertenece a Regina Valkenborgh, graduada en bellas artes que decidió usar una lata de cerveza forrada con papel fotográfico para capturar imágenes, como si fuera una cámara estenopeica. Sin embargo, lo que no sabía en aquel entonces es que conseguiría una de las instantáneas de larga exposición que más tiempo se ha tardado en tomar. Casi una década más tarde, esta increíble fotografía se reveló al mundo.
A photograph thought to be the longest exposure image ever taken has been discovered inside a beer can at the University's @BayfordburyObs! MA Fine Art graduate Regina Valkenborgh began capturing it in 2012 ????????
University of Hertfordshire (@UniofHerts) December 10, 2020
Read the full story: https://t.co/rxbuzvuQF1 pic.twitter.com/Ux0JXWJFiK
En 2012, Regina colocó la lata de cerveza en uno de los telescopios del Observatorio Bayfordbury y se olvidó de ella hasta este mismo año, cuando finalmente fue descubierta por uno de los técnicos del observatorio inglés, David Campbell. El oficial encontró el envase y pudo ver una imagen que literalmente preservó el tiempo.
De acuerdo con el comunicado de la Universidad de Hertfordshire, la fotografía registra nada más y nada menos que 2.953 arcos de luz, los cuales representan al sol elevándose y poniéndose ocho años y un mes. Mientras que las líneas corresponden al solsticio de verano, los arcos más bajos indican el solsticio de invierno.