Conocer el género del bebé es una de las preguntas que más se hacen los futuros padres, pero también hay quienes prefieren saber al dedillo el día exacto en el que podrán optar a que éste sea niño o niña. Tenemos una buena noticia para los padres, y no hablamos precisamente de cirugía o un método farmacéutico, sino de una tabla china.
Se trata de una capaz de predecir el sexo del futuro bebé. En ella aparecen dos datos a tener en cuenta por los padres: la edad de la madre y el mes en el que el bebé fue concebido, con ellos daremos con la ansiada respuesta.
Su uso es bien sencillo, pues con un rápido vistazo a las columnas tendremos los datos necesarios. En la columna vertical aparecen los meses del año, mientras que en las horizontales la edad de la madre, fácil, ¿no? Como decíamos líneas atrás, deberemos de encontrar los elementos clave: edad y mes de concepción del bebé. La tabla no sólo puede ser usada por las futuras madres antes de estar embarazadas, sino también por aquellas que ya lo están.
¿Cuál es el origen de esta tabla? Aunque su efectividad no está comprobada, no cabe duda de que a más de uno le picará el gusanillo por conocer si se trata de un mito o hablamos de algo completamente real. Su historia, tal y como recogen las leyendas, tampoco se queda atrás en lo que espectacularidad se refiere.

Tabla China. Imagen: EcoDiario
Nos remontamos 700 años en el tiempo, momento en el que dicha tabla se habría encontrado en la tumba de una familia. El porcentaje de acierto, y ojo al dato, está estipulado en torno al 90%, información que ningún estudio por ahora se ha atrevido a comprobar. Las tablillas originales están conservadas en el Instituto de Ciencia de Pekín, y a día de hoy aunque su funcionamiento no ofrece ningún misterio, todo lo contrario es referente al descubrimiento y método de sus responsables para dar con una de las respuestas más deseadas por los padres.
La tabla no sólo puede ser usada por las futuras madres antes de estar embarazadas, sino también por aquellas que ya lo están. Con la publicación de este documento, seguro que más de una madre no podrá contener las ganas de saber el género de su bebé, ¿verdad?